Pasó 72 horas detenido por mala suerte: usaron su DNI para realizar estafas

Si de algo es culpable Javier Pérez, es solo de tener muy mala suerte: perdió su Documento Nacional de Identidad (DNI) en el 2018, lo  involucraron en una investigación por estafas y fue detenido el miércoles por la tarde, en la capital correntina. Lo liberaron tras 72 horas de investigación y burocracia.

El joven kinesiólogo, oriundo de Paso de los Libres, había perdido su billetera en el 2018 y, con ella, todo lo que llevaba: tarjetas, carnets, dinero y, especialmente, su documento. Ese desafortunado pero hecho común, tres años después, tuvo un revés más que inesperado:  el miércoles, alrededor de las 19.30, efectivos policiales se presentaron en su domicilio de la Capital, y se lo llevaron hasta la comisaría. 

Sin sospecha alguna, Javier, que sabía que no había infringido la ley, accedió y en la dependencia policial le informaron que iba a quedar detenido por tener una orden de búsqueda y estar imputado en una causa por estafa, iniciada en la ciudad de Mercedes, a 260 kilómetros de la Capital. Javier quedó estupefacto.

Los abogados que lo defendieron, Pedro Karam y, su hijo, Juan Ignacio, brindaron detalles sobre el caso a ellitoral.com.ar.  El Juzgado de Garantías de Mercedes emitió la orden de detención en razón de la investigación que llevaba a cabo el fiscal Adrián Casarrubia.

El caso se originó por un par de estafas ocurridas en el Paiubre. "Para cometer el ardil, las personas que ejercieron la conducta investigada exhibieron el documento de Javier", indicó Pedro Karam.Se utilizó la identificación del joven para realizar transacciones económicas relacionadas a la compra de autos y por las cuales resultaron perjudicadas dos personas.

Un amigo del joven,Martín Braillard Poccard, relató que Javier llegó el jueves a las 21 a Mercedes. Estaba "semi desnudo porque las personas con las que estaba detenido le robaron la ropa", pero un amigo le acercó una muda y un colchón con frazadas para pasar la noche. 

Cara a cara con el fiscal Casarrubia, el kinesiólogo explicó que, en la fecha de la supuesta venta, consignada en febrero del 2021, ni siquiera se encontraba en Corrientes. "Javier estaba en Córdoba, asistiendo al equipo de vóley de Club de Regatas Corrientes", indicó su abogado y agregó que Javier "tiene la constancia de extravío y un nuevo documento".

Javier se defendió con todos estos elementos probatorios en su declaración: informó el hotel donde pernoctó en Córdoba, salió en vivo en la televisión y mostró su constancia de extravío de la billetera y DNI.

Con las irrefutables pruebas sobre la mesa, Casarrubia accedió a liberarlo el viernes, pero para Javier la maratónica desgracia continuaba:  el fiscal envió a una asistente social a chequear su domicilio en Capital y la joven se perdió. La oportunidad de recuperar su libertad se truncó y a la mañana siguiente, ya sábado, el hombre debió participar en una rueda de reconocimiento.

"La investigación atravesó injustamente a este chico y vivió un terrible momento", se lamentó su abogado y explicó que lo detuvieron las 72 horas previstas en la ley como plazo límite de investigación, hasta que finalmente se lo desvinculó del proceso.

"Lamentablemente este hecho involucró al joven y no sólo lo afectó a él, sino a su familia y amigos", comentó el abogado Pedro Karam. "Lo importante es que Javier no tuvo nada que ver en la estafa y la Justicia tomó la decisión correcta ante la evidencia presentada". agregó. El joven quedó libre el sábado por la tarde, alrededor de las 16.

El caso de Javier se viralizó en Twitter gracias al relato de su amigo Martín y cosechó cientos de "likes". En esa red social, contó sobre el terrible momento, con una pizca humor y hizo protagonista de todo a la tendencia hacia la calamidad que Javier parece acarrear .

Martín contó que, como no podía ser de otra manera, la descomunal mala suerte que persigue a su amigo no le permitió volver a casa una vez liberado: presentó síntomas de covid-19 y debió permanecer en el hospital de Mercedes, a 260 kilómetros de su hogar.

Como broche de oro, mientras esperaban el resultado del test de coronavirus, pasó lo impensado: extraviaron el documento de Javier. Y no aquel con el que se habían comprado autos, sino el actual.  "Desde que lo llevaron a la Comisaría Novena de Corrientes Capital, de ahí a la documentación en Delitos Especiales y de ahí a la ciudad de Mercedes, en algún lugar se perdió".

Finalmente, Javier dió negativo para coronavirus y pudo emprender el regreso a su hogar,  luego de vivir 72 horas de la detención más desventurada de todas.