Jueves 02de Mayo de 2024CORRIENTES19°Pronóstico Extendido

Dolar Compra:$857,0

Dolar Venta:$897,0

Jueves 02de Mayo de 2024CORRIENTES19°Pronóstico Extendido

Dolar Compra:$857,0

Dolar Venta:$897,0

/Ellitoral.com.ar/ Sociedad

La educación hoy en el nivel superior

El profesor Juan Pablo Agustín Brunel  ahonda en el desarrollo de una institución de alta calidad educativa. 
Profesora Juan Pablo Agustín Brunel. Rector del Instituto Superior Humanístico Corrientes.

Con un cálido saludo y un gesto afable por el equipo de trabajo del Instituto Superior Humanístico Corrientes, ubicado en la calle Buenos Aires 662 de la capital correntina, se inició esta entrevista con la expectativa de dialogar con su referente, el rector Juan Pablo Agustín Brunel. La intención es dar a conocer a toda la comunidad correntina el desarrollo que lleva actualmente el Instituto Humanístico, como parte de Caciep (Cámara Correntina de Instituciones de Gestión Privada).

—Profesor Juan Pablo, dos preguntas en una, ¿qué es el Instituto Humanístico y cómo es trabajar junto con sus colegas de la Cámara?

—El Instituto Humanístico, como segunda generación que lo represento, es parte íntegra de mi familia. Lo tenemos tan asimilado que está en nuestro día a día, esto me permite conocer lo más cerca posible los cambiantes rumbos que va tomando la educación, como decimos el “pulso educativo”, desde esa mirada ir direccionando el camino hacia un futuro que aporte a la mejora de toda nuestra provincia y el país. La institución fue fundada finales de los años 60 por dos visionarios de la educación doña María Teresa Cano, maestra normal nacional, profesora en Ciencias de la Educación, Lic. en Educación, y don Oscar Alberto Brunel, Dr. en Ciencias Veterinarias. Ambos proyectaron un lugar donde las personas pudiesen capacitarse y perfeccionarse sin miramientos más que lo humano, desde allí surge el Instituto Humanístico; cuna de más de 10.000 profesionales junto con alumnos del secundario, durante estos más de 50 años de vida.

Trabajar junto con las instituciones colegas de Caciep y sus representantes, nos permitió tener una visión más amplia de la educación, el debate constante, el diálogo permanente y la cercanía a problemáticas similares proponen un ambiente superador en esta atmósfera en la que vivimos y sentimos la educación.

—Juan Pablo, actualmente qué se puede estudiar en el Instituto Humanístico.

—Hoy en día continuamos con una propuesta académica enmarcada en el nivel superior, la tradicional carrera Psicopedagogía como se denominaba previa a la Ley de Educación Nacional 26.206, la misma que propuso el cambio en el nombre de carreras llevándola a ser poseedora de su actual denominación Tecnicatura Superior en Psicopedagogía cumpliendo este 2023 ya más de 30 años dentro de nuestra comunidad, su plan jurisdiccional data de 1992. Continuando las propuestas tradicionales encontramos a la carrera Tecnicatura Superior en Estimulación Temprana ya con más de 20 años de ejercicio académico y la más joven dentro de la línea humanística, la carrera Tecnicatura Superior en Psicomotricidad; una propuesta que se enmarca dentro de las más demandadas en todo el país. Las carreras citadas son de tres y cuatro años de ciclo de cursada y a través de los convenios interinstitucionales con universidades nacionales acceden a los denominados Ciclos de Complementación Curricular, básicamente consiste en completar la etapa de licenciaturas. Hemos incorporado al mercado laboral carreras innovadoras como lo son la Tecnicatura Superior en Administración Bancaria, Tecnicatura Superior en Administración Contable, también homologamos por decisión del cuerpo académico carreras de la cartera educativa provincial, que consideramos viables de aplicación como ser la Tecnicatura Superior en Bromatología y la Tecnicatura Superior en Desarrollo de Software. Todas nuestras propuestas actuales son técnico- profesionales.

—Nos gustaría que comparta, si los profesores o el equipo institucional han sentido que cambiaron los estudiantes estos últimos años, digo en líneas generales.

—El aula de hoy en el nivel superior es poseedora de variantes estáticas y dinámicas, lo primero (estático) es ingresar a clases con lo programado, sabemos que tenemos que diagnosticar previamente, estudiar las acciones o estrategias que usaremos para que cada grupo se potencie en el aula, incorporar toda esa información al proyecto académico e iniciar el proceso. He aquí donde continúa lo segundo (dinámico), en la importación de los contenidos hacia el alumno buscamos constantemente el “despertar cognitivo” en palabras sencillas, que reflexione sobre los conocimientos adquiridos, que pueda apropiarse de ellos, que se anime a enlazar con otras materias. Es importante que el lector sepa que una carrera de nivel superior, aunque suene redundante implica ingresar a un escalón más arriba que el nivel anterior o secundario, se debe reflexionar sobre esta constante, dentro de la familia, ya que así como de la primaria a la secundaria hay que hacer un salto de fe en muchas ocasiones, por todo lo que eso implica, también sucede entre el nivel secundario y el superior. En este último converge la protección familiar ante un evento que es la decisión de vida de un hijo o hija que ya por ley es empujado a la adultez a sus 18 años. Normalmente, consideramos que el aspirante a una carrera va a ir a estudiar una sola cosa, pero he aquí donde viene nuestra función como educadores del nivel superior, conjuntamente con las materias, formamos personas de forma integral, no solo para lo que eligió ser, sino para lo que será el resto de su prolífera vida como ser humanístico, que se brinde hacia el otro sin miramientos pero con firmeza y respeto, que el diálogo supere a la discordia, que sea pulcro en todos los aspectos elegidos, que pueda incluso conocer sus limitaciones y superarlas, que potencie sus fortalezas y conozca sus debilidades a fin de mejorar, que se temple el espíritu y se forme para el siguiente escalón académico que será la universidad, por todos estos fundamentos nos consideramos Colegio Universitario, como expresa el art. 22 de la Ley de Educación Superior N° 24.521. Cito: las instituciones de nivel superior no universitario que se creen o transformen, o las jurisdicciones a las que ellas pertenezcan, que acuerden con una o más universidades del país mecanismos de acreditación de sus carreras o programas de formación y capacitación, podrán denominarse colegio universitario.

—Según su mirada, o la de sus profesores, ¿los alumnos desde el secundario llegan preparados para el nivel superior?

—Eso va a depender. Te propongo una asociación, imagínate, no es lo mismo intentar subir a una calesita en marcha que cuando da sus primeros movimientos. Con esto quisiera reflexionar, como queremos aportar a la formación que trae el estudiante, por eso el diagnóstico previo es importante, conocer el grupo, sus nombre, individualizarlos, hacerles saber que en poco tiempo serán poseedores de conocimientos o herramientas cognitivas que le permitirán moverse en un mundo complejo. Cito una frase de un colega que me parece oportuna “Este ya no es mi mundo”… Claramente, siente que la actualidad es diferente a su memoria histórica, a ese momento que al salir del secundario lo preparó para la vida. Por este y muchos motivos más debemos proyectar las instituciones para formar a los estudiantes para que obtengan herramientas que las usarán en un futuro inmediato; y eso no es un adivinar el mañana, sino más bien proyectar la realidad de la manera más amplia posible, esto permitirá, creemos, que los alumnos llegarán a un nuevo mundo, mañana mismo, y podrán desenvolverse de la mejor manera.

—Retomemos un poco la actividad con la Cámara de Instituciones Educativas de Gestión Privada, al margen de trabajar en conjunto. ¿Al Instituto Humanístico lo impulsó en algún aspecto, lo potenció?

—Ser parte de Caciep nos permitió llegar a espacios que antes no estábamos, compartir escenarios diversos conjuntamente con el Gobierno de la Provincia de Corrientes, Municipalidad de la Ciudad, Ministerio de Educación de la Provincia, la Dirección de Enseñanza Privada, la Dirección de Títulos, Fecor-Apicc, Federación Económica de Corrientes y muchas otras instituciones más que compartimos actividades dentro del universo educativo. Lo más reciente es la participación como Cámara Fundadora de la Junta Nacional de Educación Privada (Juneo) si bien hemos trabajado en el proyecto desde hace varios años, hoy es un hecho, y juntos ahondaremos temáticas nacionales.

Todas estas posibilidades y considero que muchas más a futuro nos brindaron estar en una Cámara dedicada a la educación dentro de la Gestión Privada.

—Vamos concluyendo nuestra entrevista con el Rector del Instituto Humanístico Corrientes, pero quisiéramos saber más de esta dualidad que existe en la gente sobre la diferencia de la educación pública y la privada, la segunda es solo un negocio o no, ¿qué opinión le merece?

—Hoy en día creo que toda la comunidad sabe que la educación es una sola, es para todos, es un bien de la humanidad, donde toman caminos paralelos es en su proceder, que se denomina “gestión”. Tengamos en cuenta que esto es directamente proporcional a nuestra cultura, a nuestra historia como país, y que como en todos los tiempos de la humanidad, al enfrentar cambios, se producen asperezas o diferencias. Considero que está en la elección de cada familia definir qué tipo de gestión consideran apropiada para la  formación y proyección de sus seres queridos. Ahora vemos con números importantes que desde la década de los 90 y más posterior al año 2010, hay una creciente tendencia a buscar educación de gestión privada, y esto seguramente se da por todo el empeño que ponemos en cada una de nuestras comunidades educativas. Ahora bien, en referencia si es solo un negocio, mi respuesta rotunda es un certificado de “NO” en mayúsculas. La vocación que importamos para generar nuestros espacios de servicio académico no tiene un valor traducido en un simple intercambio comercial, vulgarmente expresado como: toma y dame… Aquí o donde elijas, te formarás como persona de bien, con instrumentos sólidos para tu futuro, el que generarás vos mismo cuando egreses de algún nivel o carrera.

—Para concluir, profesor Juan Pablo. La pregunta es ¿tenemos o tienen nuestros hijos futuro en la educación de hoy?

—Sí, tenemos, no solo futuro, tenemos pasado (historia), presente el hoy, y tenemos proyección inmediata hacia el futuro. Pero también debemos saber que tenemos que hacer un esfuerzo extra, nuestro prócer el General José Francisco de San Martín nos mostró el camino, como tantos otros que podría nombrar y que debemos honrar su memoria y sus actos. Si deseamos que nuestro país sea libre e independiente “nuevamente” debemos emanciparnos de la ignorancia y del conformismo utilitario, debemos empoderarnos del conocimiento, la fe y el esfuerzo día a día, para que nuestros hijos, nietos, bisnietos y generaciones venideras luchen por el suelo argentino. Lo tenemos en nuestro ADN, está presente, tal vez apacible, pero no me cabe la menor duda de que este es el camino de la restitución de nuestra Argentina, una educación fuerte.

¿Te gustó la nota?

Ocurrió un error