Por Juan Carlos Raffo
Corría el año 1840... y fuerzas “rosistas” invaden el sur de Corrientes. Los invasores integraban sus huestes con 4.000 hombres bajo las órdenes del oriental Manuel Oribe y el santafesino Juan Pablo “Mascarilla” López.
El ejército que organizaba Juan Lavalle en el Rincón del Ombú, entre los departamentos de Curuzú Cuatiá y Mercedes, todavía no contaba con el adiestramiento suficiente para librar batallas frontales, lo que obligó a Lavalle a retroceder con sus tropas hasta el río Corrientes, dejando solamente los escuadrones que estaban al mando de los hermanos Joaquín y Juan Madariaga, quienes consiguieron arrebatar la caballada de los adversarios.
Tanto el repliegue de Lavalle y su ejército, como la sorpresa que se llevó la fuerza opositora al ver la dimensión del ejército que preparaba Corrientes, hizo que los invasores se retiraran rápido de la provincia, evitando un enfrentamiento que pudo haber cambiado en gran medida el curso de la historia.
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