La música y el aplauso se adueñaron del recinto de la Legislatura de la Provincia de Corrientes, cuando en la noche del jueves y como cierre de una propuesta emprendida por el diputado (PJ) Walter Insaurralde, Rudi y Nini Flores fueron distinguidos como “Ciudadanos Ilustres”.
Con la presencia en el estrado de la Presidenta de la Cámara de Diputados, Josefina Meabe, del vice gobernador Galantini y de Walter Insaurralde, quien además es Presidente de la Comisión de Educación y Cultura de la Cámara de Diputados, la Orquesta Folklórica de la Provincia abrió con música una noche en la que primaron los sentimientos hacia dos hijos que, con la nostalgia a flor de piel, se confesaron “emocionados ante el reconocimiento con el cual el pueblo nos honra”.
Rudi y Nini Flores, hijos de Avelino (que actualmente integra el conjunto “Trébol de Ases”), hace diez años se encuentran radicados en París, Francia. Embajadores de la música de Corrientes, con acordeón y guitarra los hermanos llevaron a la “ciudad de las luces” ese ritmo distintivo que aprendieron desde niños en un hogar de puertas abiertas a la canción.
Humildad de pueblo chico en el amplio margen de la geografía de países como Bélgica, Alemania, Suiza, Inglaterra, Holanda donde Rudi y Nini ofrecen sus conciertos y graban “un chamamé quizás atípico, porque no conformamos el conjunto tradicional sino que nos valemos de la guitarra y el acordeón, así que la recreación y los arreglos con variaciones son casi una necesidad”.
Necesaria melodía que en “Kilómetro 11” (cierre del breve concierto ofrecido en retribución al homenaje) se palpó con nostálgico reclamo del ballet folklórico que se emparejó para el baile y salió a la improvisada pista donde los encuentros (y desencuentros) políticos por una noche se tomaron un respiro. Respiro más que profundo ya que alcanzó para cambiar la arenga partidaria por un sapukay lastimero.
“Las costumbres en la lejanía se potencian”, dice Nini a El Litoral. Por más agenda de trabajo que resulte agotadora en principio, el mate y el asado están presentes como están los amigos que llegan de visita”.
“Este reconocimiento que hoy recibimos es un estímulo y un aliciente para nuestra trayectoria musical ya que el camino a veces se torna difícil estando lejos”, expresó Rudi Flores y agradeció asimismo a la Orquesta Folklórica por su participación, al diputado Walter Insaurralde, gestor de la distinción y al pueblo de Corrientes, una provincia de la que se sienten “profetas”.
Con un proyecto laboral que durante los meses de diciembre y enero del próximo año los retendrá en el país (todos los miércoles de diciembre estarán en “Clásica y moderna”, de Buenos Aires, el local que Ñata Poblet regentea en Callao al 800), los Flores dicen que les hace bien esto de volver con continuidad a Corrientes, porque acá están los afectos y es una dosis de energía que hace acopio en el cuerpo y en el alma. La inspiración se aferra a estímulos propios, esos que solo el corazón entiende a la hora de la lógica.
Este fin de semana estarán en el interior de la provincia de Corrientes como parte del Programa “Corrientes de Punta a Punta” (Bella Vista y Santo Tomé el 4 y 5, Goya y Santa Rosa el 10 y 11 respectivamente) y el viernes 9 cruzarán a la ciudad de Resistencia, donde en el Complejo Cultural “Guido Miranda” presentarán, dentro del ciclo denominado “Melomanía”, su disco “Canto a mi terruño”, que promocionan en esta zona.
Con nueve discos grabados, todos de chamamé, el sueño que transmite Nini Flores a El Litoral, es casi una realidad de la que ellos forman parte:”insertar el chamamé en Francia, más precisamente en París, una ciudad en la que confluyen todas las culturas. Francia es un país generoso, nos da la posibilidad de vivir de la música, de nuestra música, el compromiso es doble pero aceptamos el desafío”.
“Tuvimos la suerte de nacer en Corrientes (su hermano Rudy en Mburucuyá y él en la capital de la provincia) y en mi caso particular, de haber conocido gente grandiosa y valiosa como Fito Ledesma, Rubén Miño, Roque González y Pedro Montenegro. Con Fito mantenía largas conversaciones, me trataba como un señor y yo apenas tenía 14 años. Estoy orgulloso de que Pedro (que reside en Buenos Aires) me reciba en su casa”.
Siempre es bueno partir cuando queda la esperanza de volver y en el andén de la vida hacer un alto en el camino para buscar la estación aquella que conduce al pueblo de sus amores.
Rudi y Nini Flores lo saben, por eso cada despedida es un “hasta luego” que más breve se vuelve cuanto más son las ganas de tenerlos por estos pagos.
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