La población capitalina creció al ritmo de la inmigración, las obras y la universidad

FACUNDO CAMPOS

@Facundo_Campos

Con sus 428 años la ciudad de Corrientes es la urbe más antigua del Nordeste argentino y se configuró no sólo en un punto estratégico para el desarrollo y expansión para de la zona, sino también se convirtió en una ciudad que mantuvo un crecimiento sostenido en su población y que en los últimos 50 años registró una explosión en cuanto al incremento de sus habitantes, casi triplicándose y generando una considerable expansión urbanística hacia el Sur. Desde aquel puñado de casillas y asentamientos precarios construidos alrededor del fuerte emplazado en el actual solar de la plaza 25 de Mayo hasta convertirse en la Capital provincial que actualmente cuenta con casi 400 mil habitantes, la población correntina fue aumentando impulsada por la mixtura multicultural de habitantes originarios de la Mesopotamia con inmigrantes tanto de países vecinos como de Europa y Africa.

Según datos estadísticos oficiales entre 1970 y 2010 la población capitalina se incrementó a más del doble impulsada por las grandes obras de infraestructura, la creación de la universidad, los cuales se sumaron a la inmigración que dejó su marca en el país a mediados del siglo XIX y luego de 1950.

Tras la llegada del adelantado Juan Torres de Vera y Aragón en 1588 al recodo del Paraná hoy conocido como Arazaty, según consignan algunos libros de historia, para 1620 la ciudad contaba con unos 400 habitantes distribuidos en el solar ubicado en la zona que actualmente ocupa la plaza 25 de Mayo.

Inicialmente la población correntina estuvo compuesta por habitantes originarios de la zona pertenecientes a la tribus de guaraníes mayoritariamente, a la que se sumaron los criollos de Asunción, los españoles castellanos y posteriormente una mixtura con pobladores africanos traídos a América desde el siglo XVII. La composición de la población de la ciudad de Corrientes fue básicamente criolla, a la que se sumaron los clásicos grupos de inmigrantes italianos, alemanes y sirio-libaneses que se afincaron a mediados del siglo XIX y a partir de la década del 50 del siglo XX tras las guerras mundiales.

El primer relevamiento oficial del cual se registran datos, y que es nombrado en el censo de 1869, data de 1797 y señala que en la Capital habitaban unas 4.500 personas. Asimismo, el primer censo de 1869 realizado durante el gobierno nacional de Domingo Faustino Sarmiento, arrojó que en la ciudad de Corrientes ya contaba con unos 11.218 ciudadanos.

Ya en el tercer censo nacional de 1914, la Capital provincial registró unos 39.031 pobladores lo cual también registra el impacto que generó la inmigración de ciudadanos europeos, como españoles e italianos a partir de mediados y fines del siglo XIX.

Vale destacar la importancia que tiene Corrientes, desde su fundación como un lugar geoestratégico para la expansión de la colonización española por la zona, así como en la actualidad como paso intermedio hacia países limítrofes, permitió configurarse en un asentamiento poblacional clave desde sus inicios.

Otro momento de gran crecimiento poblacional fue durante la década de 1950 donde la ciudad ya contaba con más de 70 mil habitantes, impulsado también por la ola de inmigrantes que llegaron al país tras las guerras mundiales.

Explosión en el aumento de la población

Según explica la Dirección de Estadísticas y Censos (Deyc) del Gobierno de la Provincia, en los últimos 56 años el crecimiento de la población correntina capitalina fue del casi del 200%: mientras que el Censo Nacional de 1970 contabilizó unos 137.823 habitantes, el año pasado el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (Indec) calculó estimativamente unos 389 mil habitantes, es decir un aumento del 182%.

La entidad estadística provincial explica que los períodos de mayor incremento poblacional se registran en las épocas donde hay crecimiento económico u obras públicas de gran magnitud. Sin dudas que dos hechos grandes que modificaron a la urbe fueron la creación de la Universidad Nacional del Nordeste (Unne) en 1956 -que generó que habitantes de otras provincias y países limítrofes vinieran a vivir a Corrientes- y la construcción del puente interprovincial General Manuel Belgrano en 1973, que derrumbó la imagen de una Corrientes aislada y generó una mayor y mejor conectividad.

Por su parte, el Indec estimó que para 2025 la población de la ciudad de Corrientes ascenderá a los 430 mil ciudadanos, lo que equivaldría a un aumento del 10,5 por ciento en comparación del censo de 2010 (que arrojó unos 358.223 habitantes).

La cifra

400

Fue la cantidad de habitantes que tenía la Capital en las primeras décadas del siglo XVII.

El dato

Corrientes fue fundada como un puerto de paso entre las ciudades de Asunción y Buenos Aires debido a su ubicación estratégica sobre el río Paraná.