El Gobierno nacional pretende acordar con todos los gobernadores la firma de un compromiso por el cumplimiento de las metas fiscales, antes de enviar al Congreso el proyecto de Presupuesto 2019. Sería una puesta en escena simbólica, pero contundente de cara al tratamiento del proyecto. “No queremos sorpresas”, explican desde Casa Rosada, al aludir al doble juego que en ocasiones anteriores desplegaron los mandatarios, entre lo que acordaban con el Ejecutivo y el sinuoso comportamiento de sus legisladores.
La Casa Rosada busca que el esfuerzo de recortar los gastos de 100 mil millones de pesos se distribuya según los índices de coparticipación.
Presionado por la preocupación que habían manifestado los gobernadores ante la exigencia fiscal planteada para el Presupuesto 2019, el Gobierno mejoró la propuesta inicial para cumplir con la meta del 1,3% comprometida con el Fondo Monetario Internacional.
La propuesta del Gobierno nacional, más allá de la nueva cifra, es que cada distrito aporte según el porcentaje de coparticipación que percibe.
Para la Ciudad de Buenos Aires el ajuste a realizar será bastante menor. Unos $5.147 millones, indicaron medios nacionales.
Las provincias que gobierna el radicalismo ya tienen sus números: Corrientes tendrá que reducir $3.420 millones; Mendoza, $3.747 millones y Jujuy, $2.559 millones. Todo acorde con el porcentaje de coparticipación.
Desde el Ministerio de Hacienda pusieron sobre la mesa una batería de opciones a recortar. Luego, cada provincia decidirá dónde apretar el gatillo. Entre las opciones más riesgosas está el incentivo docente.
En 10 días habrá una nueva reunión y las provincias deben llevar respuestas y propuestas alternativas.
Los próximos días serán clave para saber quién pagará el ajuste del 2019. En Corrientes aseguran que aún nada está definido, mucho menos los números de un eventual ajuste.
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