Con 100 animales en la Pista 2 del predio ferial de Palermo, la raza Braford pasó con mucho éxito por la Exposición Nacional de Ganadería de la Sociedad Rural Argentina (SRA), mostrando el gran presente que tiene la raza, considerada por muchos criadores, técnicos y expertos como el mejor Braford del mundo. Un logro de los criadores, a fuerza de muchos años de selección que se coronaron con una importante consistencia genética, requerida actualmente desde distintos lugares del mundo.
Después de la Nacional de Corrientes, que fue considerada muy exitosa para los criadores, la muestra de Palermo despertó mucho interés por parte de las cabañas que producen Braford. Por eso enviaron cerca de un centenar de reproductores desde 27 cabañas, algunas participando por primera vez de de la expo de Palermo, poniendo a la raza como en el tercer puesto entre las que más animales ingresaron a Palermo.
“No tengo dudas que el Braford argentino es el mejor del mundo”, dijo Gastón García, reconocido asesor genetista que el lunes estuvo a cargo de las juras de clasificación en la Pista 2 del predio de Palermo. Una definición similar había dado Carlos Ojea Rullán, otro asesor muy reconocido, durante la Nacional Braford de Corrientes, a principios del mes de junio.
“Tenemos un gran presente y eso es fruto del trabajo de los criadores; son años de selección, de búsqueda de un tipo de animal que le sirva a la ganadería del país”, consideró Fernando Fortuny, presidente de la Asociación Braford Argentina (ABA). El criador salteño se mostró muy satisfecho por el nivel mostrado por la raza en la exposición porteña. “Lo que vimos hoy en la pista fue de excelencia”, señaló Fortuny.
Juras
En la pista de juras de la raza Braford la calidad fue muy buena. En la mañana del lunes se clasificaron las hembras, y luego del mediodía fue el turno de los machos. Todo con Gastón García como jurado, quien explicó detalladamente cada una de sus decisiones en las filas de las distintas categorías.
A primera hora de la tarde quedaron formadas las filas finales para elegir a los Grandes Campeones. Como es habitual, primero fueron las hembras, donde el premio Gran Campeón Hembra fue para “La Curé”, una vaquillona con cría al pie y preñada que fue presentada por las cabañas El Chañar, de Prada y Gutiérrez, y Marta Carina, de Marta Carina SA.
“Es una hija de Felipe, que nació y se crió en la costa del Iberá; la vaca estaba muy bien”, dijo Tiziana Prada, titular de cabaña El Chañar, que tiene sus campos en la zona de Capitá Miní, en el departamento Mercedes. En este sentido, es una hembra que ya les trajo muchas alegrías a la cabaña, ya que hace dos años había sido Tercer Mejor Hembra de Palermo y en ese entonces la cabaña Marta Carina compró la mitad del animal.
“Nosotros criamos en Corrientes, donde si bien las condiciones no son buenas, con pastos celulósicos, campos duros, temperaturas altas; el Braford nos ha demostrado una gran adaptación, una docilidad muy destacada para ser manejado en grandes rodeos, y una productividad notable”, señaló Tiziana Prada.
El premio Reservado Gran Campeón Hembra fue para el Box 917, de la cabaña cordobesa Don Luis, de Marcelo y Diego Grosso. Se trata de una hija de “Experto”, que compitió en la categoría vaquillona, y ya en la competencia de la categoría había sido muy ponderada por el jurado y comentada entre los presentes. “Es una emoción muy grande, para nosotros que la venimos luchando de abajo”, dijo Marcelo Grosso, notablemente emocionado por el logro de su cabaña.
A la hora de la elección de los machos, todo fue emoción para Alejandro Lauret, de la cabaña La Dominga, del norte de Córdoba. Con varios animales en la fila final, la cabaña se llevó los dos premios más importantes: Gran Campeón y Reservado Gran Campeón Macho Braford de Palermo 2018. El mejor toro fue un Junior, hijo de “Grandeur”, nacido en enero del 2017; mientras que el segundo animal fue el Box 849, un hijo de “Ibirá Pitá” nacido en mayo de 2016.
“Después del nacimiento de mi hija es el día más importante de mi vida”, dijo Alejandro Lauret, visiblemente emocionado tras la coronación de sus dos toros como los mejores de Palermo. “Creo que es coronar un esfuerzo de muchos años, donde la venimos peleando, somos una cabaña familiar, que viene apostando fuerte por el Braford”, dijo el criador.
Sobre la raza, Lauret sostuvo que “nosotros estamos en el Norte de Córdoba, al pie de las sierras, con inviernos de hasta 8 grados bajo cero y veranos de 45 grados; y el Braford ha mostrado un poder de adaptación notable; nos trae permanentes satisfacciones”, dijo este productor, que si bien participa como invitado en algunos remates de cabañas, también comenzó a exportar su genética a otros países.
De esta manera, la raza dejó una importante huella en Palermo, ratificando el gran presente que atraviesa el Braford argentino, considerado por muchos, el mejor del mundo.