Jueves 25de Abril de 2024CORRIENTES21°Pronóstico Extendido

Dolar Compra:$852,5

Dolar Venta:$892,5

Jueves 25de Abril de 2024CORRIENTES21°Pronóstico Extendido

Dolar Compra:$852,5

Dolar Venta:$892,5

/Ellitoral.com.ar/ Opinión

Boxeo

Por José Ceschi

 ¡Buen día!  Les cuento una tira del dibujante Rivero. El recio boxeador, mientras pega fuerte a la “bolsa” del gimnasio, recapacita: “Si yo hubiera tenido un título, ahora no tendría que luchar por el título”.

Bueno, pensándolo bien, en el tiempo que vivimos el título no es que valga mucho… pero queda la esperanza para el futuro.  Así y todo, la reflexión del pugilista debiera conocerse más en los ambientes en los que se estimula el boxeo como ideal de juventud. Quienes me conocen saben cuál es mi amor por el deporte y, precisamente, ese amor es el que me impulsa a no considerar al boxeo como deporte verdadero. Pienso que basta citar el viejo principio latino mens sana in corpore sano para concluir sin más que el boxeo no apunta precisamente a sanar el cuerpo, sino todo lo contrario, a golpear de tal manera al oponente, que termine lo más derrotado posible. El KO es el ideal de todo boxeador y cuanto más rápido, mejor.

Y si dejamos el aspecto físico y entramos al mundo del espíritu, el boxeo no contribuye precisamente a mantener sana el alma, dado que todo se programa mentalmente para derrotar a los golpes al adversario.

Además, las secuelas de las palizas dan mucho que pensar. Hace varios años la Asociación Médica de los Estados Unidos calificó de “obscenidad” al boxeo y pidió a las naciones civilizadas que lo condenen como tal. ¿Hará falta recordar que el 15 por ciento de los boxeadores profesionales padece de lesiones cerebrales que en muchos casos resultan irreversibles? ¿Hará falta recordar que hasta principios de los años 80 los boxeadores que murieron a causa de los golpes en el ring superaban los 300? Si entramos en el oscuro mundo de las finanzas, especialmente en los EE. UU., el boxeo representa un buen negocio para los empresarios y una tentadora posibilidad para los pugilistas dotados; sólo que el costo humano es demasiado alto: quedan a su paso demasiadas víctimas.

Hay quienes, con buena voluntad, piensan que el boxeo amateur puede ser una buena alternativa al profesional.

¡Hasta mañana!

¿Te gustó la nota?

Ocurrió un error