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/Ellitoral.com.ar/ Sociedad

Registran otro caso de leishmaniasis en Capital y suman seis en la provincia

Se detectó nuevamente la enfermedad, en su variante cutánea (aquella que no compromete a las mascotas). Las muestras fueron confirmadas por el Dispensario Dermatológico. 

La leishmaniasis continúa movilizando al sistema sanitario de Corrientes, dado que en una semana se confirmaron dos nuevos casos de la enfermedad de la variante cutánea en Capital y Monte Caseros.

En este contexto, de acuerdo a los registros epidemiológicos del Ministerio de Salud Pública, en lo que va del año ya son seis los casos detectados en la provincia: cinco de leishmaniasis cutánea, y uno de visceral. 

En lo que respecta a Capital, la semana pasada se detectó el primer caso cutáneo en una mujer que avanza favorablemente al tratamiento, en tanto que la niña a quien confirmaron la variante visceral ya fue dada de alta.

Al respecto, la jefa del Programa Provincial de Leishmaniasis expresó a El Litoral: “En Corrientes tenemos tres tipos: la cutánea, la mucocutánea y la visceral. Este año detectamos casos de cutánea en Riachuelo, uno en San Miguel, uno en San Luis del Palmar  y un caso de leishmaniasis visceral en Capital. Además, la semana pasada se confirmó un caso leishmaniasis cutánea en Capital, y otro en Monte Caseros”. (Ver página 13, Interior).

Dicho esto, la especialista en la materia explicó que la “leishmaniasis es un conjunto de enfermedades muy complejas, porque si no son tratadas a tiempo pueden ser muy graves. Sin embargo, en Corrientes contamos con centros de referencia como, por ejemplo, el Dispensario Dermatológico (para la atención de cutánea), y todos los casos están teniendo una muy buena evolución. La niña que fue internada por leishmaniasis visceral ya fue dada de alta”.

Detección

El primer caso de leishmaniasis cutánea de Capital se detectó la semana pasada en una mujer mayor que vive en una zona céntrica de la ciudad. Una vez que el Dispensario Dermatológico confirmó la enfermedad la mujer accedió al tratamiento gratuito provisto por Salud Pública, y no se realizó fumigación debido a que su hogar no fue el foco de infección. De todas maneras, en los operativos continúan dando a conocer las diferentes metodologías preventivas.

“Cuando se notifica el caso realizamos un estudio epidemiológico retrospectivo, para saber cual pudo haber sido el foco de infección ya que la leishmaniasis cutánea tiene un período de incubación muy largo, de entre dos semanas a un año. 

En este caso, la señora vive en un barrio muy urbanizado y, como el flebótomo habita en zonas rurales, conversando con ella entendimos que el contagio sucedió fuera de la ciudad”, precisó la coordinadora del programa de leishmaniasis.

Además, Karina Ramos destacó que la provincia cuenta con un sistema organizado para hacer frente a la problemática de la leishmaniasis dado que el Dispensario Dermatológico es centro de referencia en leishmaniasis tegumentaria (cutánea y mucocutánea); en tanto que los referentes de visceral trabajan en el Hospital Pediátrico e infectólogos de los centros de salud de adultos.

Prevención

Por un lado, la leishmaniasis cutánea es una enfermedad causada por parásitos, transmitidos al ser humano por la picadura de distintas especies de insectos flebótomos. La enfermedad provoca unas lesiones importantes en la piel.

En este caso la prevención se centra en utilizar repelente en caso de tener animales silvestres (reservorios de la enfermedad, en caso de vivir en zonas rivereñas o transitar por zonas selváticas o con mucha vegetación).

Por otra parte, la leishmaniasis visceral, en tanto, se transmite también por flebótomos pero los reservorios son los perros. En este sentido, recomiendan el cuidado responsable de las mascotas, y el uso de repelente.

Para ambos casos, es primordial la limpieza de los patios, evitar la acumulación de hojas o basura orgánica.

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