Con estudios de microfósiles, reconstruyen cómo se formaron ambientes de la provincia

 Investigadores del Centro de Ecología Aplicada del Litoral (Unne-Conicet) y la Facultad de Ciencias Exactas (Unne) buscan reconstruir los cambios climáticos y de vegetación durante el Cenozoico tardío en la provincia de Corrientes, y en especial determinar la incidencia del cambio de dirección del río Paraná en la modelización del paisaje. 

La Mesopotamia argentina es una llanura limitada por grandes ríos, y presenta una interesante historia ambiental y de cambios climáticos.

Actualmente, la provincia de Corrientes es una llanura suavemente ondulada rodeada por los grandes ríos Paraná y Uruguay; y parte de su superficie está cubierta por agua (esteros, lagunas, ríos, etc).

Estos grandes ríos fueron agentes de sedimentación y modelización del paisaje en casi todo el territorio. Predominan los sedimentos de la última parte de la era Cenozoica (división de la escala temporal geológica que se inició hace unos 66 millones de años y que se extiende hasta la actualidad), principalmente del Cuaternario (los últimos 2,58 millones de años).

Actualmente, el río Paraná fluye a través del norte y oeste de la provincia, sin embargo, este río anteriormente corría más al este y cambió su dirección y posición en varias ocasiones hacia su ubicación actual. Su evolución estuvo controlada por los cambios climáticos ocurridos desde el Cenozoico medio y la migración Este-Noroeste del río Paraná tuvo un rol importante en la geomorfología de la provincia.

Las formaciones geológicas “Ituzaingó” (Plioceno-Pleistoceno Inferior) y “Toropí/Yupoí” (Pleistoceno Superior), las más ampliamente distribuidas en la provincia de Corrientes, son depósitos fluviales relacionados en diferentes momentos con el actual río Paraná.

Sobre esas formaciones existen estudios paleontológicos y estratigráficos realizados, pero los datos eran insuficientes para reconstruir cómo variaron los entornos y cómo la migración del río Paraná podría haber afectado a la vegetación durante la última parte del Cenozoico.

En ese sentido, una investigación realizada en el Centro de Ecología Aplicada del Litoral (Cecoal, Unne-Conicet) y la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales y Agrimensura de la Unne buscó profundizar el estudio de dichas formaciones geológicas en Corrientes, mediante la técnica de análisis fitolíticos.

Los fitolitos son estructuras minerales microscópicas de origen vegetal, cuyo estudio demostró ser una valiosa herramienta para describir la composición y variaciones composicionales de comunidades vegetales en distintas regiones fitogeográficas de Argentina; como así también, caracterizar paleoambientes no sólo en sedimentos cuaternarios de la Argentina, sino más atrás en el tiempo.