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/Ellitoral.com.ar/ Sociedad

Por la inflación, se comprime el stock de los comedores y la demanda se mantiene alta

Los centros comunitarios intensifican su labor y aparecen nuevas convocatorias solidarias para colaborar con diferentes barrios. 
Centros. La labor se intensifica en tiempos de inflación.

La pobreza infantil alcanzó el 51,7%, “sigue una tendencia en ascenso desde el 2011, pero en 2018 alcanzó la cifra más elevada de la década”, advierte el último informe del Observatorio de la Deuda Social Argentina de la UCA (Universidad Católica Argentina. 

En este contexto los comedores de la ciudad, lejos de todas las estadísticas pero cercanos a la situación social, expresaron a El Litoral que la demanda en sus cocinas solidarias continúa siendo alta.

Sumado a esto, desde la mayoría de los centros comunitarios que funcionan a pulmón expresaron que la inflación dificulta la renovación del stock de víveres, por lo que intensifican las colectas de alimentos.

 “En nuestra lista tenemos 105 chicos que vienen a merendar, unas 50 mamás anotadas, y algunos que vienen por un tiempo pero después desaparecen.  Asistir a todos ellos es muy difícil porque todo está más caro y las provisiones vuelan. Por eso publicamos varios pedidos de donaciones, entendemos que la crisis nos afecta a todos, pero gracias a Dios siempre aparece algún alma generosa que nos brinda su ayuda”, expresó a El Litoral Isabel Ríos, coordinadora del comedor “Corazón Contento” del barrio Patono.

Las sedes solidarias consultadas atienden entre 50 y 230 personas por día, y la preocupación diaria se centra en los insumos necesarios para cubrir esa demanda. Al  respecto, Gisela referente del comedor “Piecitos Descalzos” del barrio Punta Taitalo señaló: “En los últimos meses aumentó bastante la cantidad de chicos y de adultos. Asisten familias completas y lo que más necesitamos son alimentos para las meriendas y las cenas que realizamos los miércoles”.

Desde el merendero “Papa Francisco” del Bañado Norte, si bien no creció la demanda de familias, por día realizan unas 230 porciones. “Trabajamos a pulmón de lunes a sábado, ahora estamos haciendo el almuerzo, pero por los faltantes de leche a veces no podemos brindar el desayuno o la merienda. A medida que recibimos donaciones, preparamos la comida”, indicó.

Cruzada

El altruismo también parece potenciarse, de hecho un grupo de jóvenes emprendieron una cruzada solidaria denominada “Dibujando Sonrisas”. En una primera oportunidad, convocan a sumar donativos de alimentos para entregarlos al centro comunitario “Mis Angeles” del barrio Quilmes.

Las principales necesidades son insumos alimentarios, pero además necesitan: dos ollas grandes, dos cucharones, vasos descartables, jarra grande, mesa y manteles. Los interesados en colaborar pueden hacerlo escribiendo al Facebook: “Cruzada solidaria dibujando sonrisas”, o bien al número: 3794-517856.

Una de las integrantes de la campaña, Julieta Pedrozo, explicó: “Por las necesidades económicas que estamos atravesando en el país tuve la idea de juntar donaciones para entregar a comedores, y se sumaron mis amigas Sofía González Brizuela, Melanie Ojeda Moringa y Laura Gómez Lisardía. Tenemos previsto dar una mano a los comedores que necesiten e ir rotando los lugares para poder cubrir las insuficiencias que realmente son muchas”.

Cómo ayudar

Paralelamente, todos los comedores consultados necesitan: leche, chocolate, verduras, carne, yerba, fideo, arroz,  azúcar y sal. Para colaborar con “Piecitos Descalzos” se puede llamar al número: 3794-520368; con el merendero “Papa Francisco” al: 3794-627902; y con “Corazón Contento” a: 3794-687773.

De esta forma, tanto los comedores como los grupos solidarios buscan hacer frente al contexto de crisis económica.

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