Por la bajante, activaron servicio fluvial especial para que isleños puedan cobrar

A la medida de aislamiento social preventivo que rige por la emergencia sanitaria provocada por el coronavirus, se sumó una histórica bajante del caudal del río. Ambos factores influyeron en la suspensión del servicio fluvial que comunica a la isla Apipé Grande con Ituzaingó. Durante más de una semana, el abastecimiento de mercadería fue garantizado con una lancha, pero desde el último jueves -aunque con ciertas restricciones y precauciones- se activó una prestación especial.

Desde el Municipio manifestaron a El Litoral que en el puerto ituzaingueño el nivel del Paraná está por debajo de los 30 centímetros, “y si bien frente a la isla está un poco más alto, igual tiene un caudal mucho menor a lo normal”. Una cuestión que -indicaron- provoca dificultades en la navegación. Por eso, comentaron que “hace más de una semana, un particular con una lancha chica es quien abastece a los comercios locales”. 

A su vez, aclararon que “los pobladores sólo en un comercio pueden pagar con débito, en los otros deben hacerlo con efectivo o bien pedir fiado hasta que puedan ir a Ituzaingó a retirar plata del Banco”.

Precisamente para que los isleños no tengan que trasladarse hasta la citada ciudad y continúen cumpliendo con el aislamiento social preventivo por el coronavirus, se había programado que un banco móvil se trasladara hasta Apipé. “Pero la bajante es tal que la balsa, que podría transportar al camión, no podrá circular. Ante esta situación, como alternativa, se realizaron gestiones ante los organismos correspondientes para que, por ejemplo, se le permitiera al banco móvil circular por el paso fronterizo Ituzaingó-Ayolas. Y así arribara al puerto Loma Negra y desde ahí los trasladara una balsa”, comentaron desde el Municipio de Apipé Grande a este diario.

Sin embargo, fundamentaron que esa posibilidad  tuvieron que descartarla por dos cuestiones: la primera es que está cerrado el paso fronterizo debido a la emergencia sanitaria y la segunda “porque tampoco tenemos la certeza de que en esa área exista el caudal necesario para que la balsa transporte un camión blindado”, especificaron. Al mismo tiempo acotaron: “Es decir que si nos avalaban el paso, existía ese otro inconveniente como consecuencia de la bajante”.

En este contexto, admitieron que “estamos en una situación compleja”.

De todas maneras, quienes usualmente suelen prestar el servicio fluvial que une la isla con Ituzaingó, el último jueves resolvieron activar un prestación especial. Es que un número considerable de habitantes “necesitan cobrar y también están quienes sí o sí necesitan comprar sus medicamentos. Entonces decidimos volver a realizar los traslados, pero con mucha precaución y sólo durante la mañana”, explicó una de las personas que presta el mencionado servicio. En este sentido, añadió que “en la primera jornada hicimos pocos viajes, hoy (ayer) sí ya fueron más porque la gente quería ir a Ituzaingó a cobrar. Y como se extendió la atención bancaria (sábado y domingo), se harán nuevos viajes”. 

(CC)