Polémica en Chaco por la posibilidad de endurecer la cuarentena obligatoria

El intendente de Resistencia, Gustavo Martínez, anunció ayer que “la ciudad debe volver a una cuarentena más estricta. Tenemos que tomar medidas y volver a fase 1. La situación es extremadamente complicada. La posibilidad de contagio se ha disparado”. Desafió al propio gobernador Jorge Capitanich, quien 24 horas antes había dicho: “El tema de la discusión no es si se vuelve o no a retroceder fases, me parece que esa es una discusión cerrada”. 

Chaco se instaló cómodamente como la provincia con mayor cantidad de contagios después de Buenos Aires y Ciudad de Buenos Aires. Hasta el momento, según datos oficiales, tiene 660 casos confirmados, 35 muertes y una tasa de letalidad del 5,30%. Por eso, el intendente Martínez alertó ayer sobre “la posibilidad de una tragedia si no se hace un esfuerzo”.

“Se suspende el servicio de transporte público de pasajeros”, anunció en conferencia. “Hay que hacer un esfuerzo tremendo. Porque si no esta situación se convertirá en tragedia”, agregó

Para Capitanich, en tanto: “La provincia se encuentra atravesando la fase 4 de la pandemia, porque tiene un promedio de 25,4 días de tasa de duplicación de casos, cuando el límite inferior es de 25”.

 “Esto fluctúa de acuerdo al surgimiento o no de casos”, señaló  y remarcó que la continuidad del aislamiento debe ser con una “cuarentena administrada” y con un sistema “de análisis inteligente”.    

“Tuvimos una fase de caída pronunciada, pero ahora estamos en una fase acelerada producto de este clúster del barrio Toba”, señaló el mandatario chaqueño. En ese sentido, apuntó que por eso se dispuso un operativo para la detección de casos, hisopado y bloqueo a partir de un polo sanitario en el populoso barrio habitado por miembros de la comunidad qom, la más afectada hasta el momento por el covid-19 con más de 120 casos positivos y 10 muertes. No obstante, Capitanich reconoció que se detectaron casos en 45 barrios de la ciudad de Resistencia.   

 (AG)