Tras un extenso proceso judicial, juró un concejal electo en octubre del 2017

Desde que se inició el proceso judicial en el Juzgado de Paz local hasta que se expidió el Superior Tribunal de Justicia (STJ) transcurrieron más de dos años. Durante ese período, quienes consideraban que el ex intendente Isaac Ramírez no podía asumir como edil de Berón de Astrada realizaron planteos en distintas instancias. Mientras que el concejal electo en octubre del 2017 apeló cada una de las presentaciones. Finalmente, en marzo pasado, el STJ ordenó que, en un plazo no superior a los 15 días hábiles, el mencionado integrante del Legislativo electo por la boleta de Cambio, Austeridad y Progreso (CAP) debía asumir. Ese acto, sin embargo, se vio demorado por distintos motivos y se realizó recién el último miércoles.

Casi 31 meses tuvo que esperar Ramírez para jurar como edil, cargo para el cual fue electo en las urnas. “Lamentablemente quienes no respetaron la voluntad de los electores, cuestionaron cosas inexistentes y me privaron de ejercer mi rol”, expresó el concejal de CAP en diálogo con  El Litoral.

Recordó que “dijeron que mi cargo de concejal era incompatible con mi trabajo. No tuvieron en cuenta en su momento que renuncié a mi dieta de concejal y también que dejé mi cargo de director del centro de salud de Yahapé. Y, por si fuera poco, dijeron que no estaban aprobados los balances durante mi gestión como intendente. Eso no era cierto, pero hacer las presentaciones y demostrarlas en cada una de las instancias demandó tiempo”.

En este contexto, indicó que los planteos en cada instancia fueron realizados por distintas personas que en esos momentos eran concejales. “Logramos demostrar que me correspondía asumir”, afirmó, aunque acotó que “ya transcurrió más de la mitad de lo que sería mi mandato. Asumí ayer (miércoles) y seré  concejal hasta diciembre del 2021, cuando vence el periodo para el cual la gente me votó”.

Ramírez comentó que la demora en el cumplimiento de la sentencia del STJ respondió, primero, a la pandemia, “porque estaban restringidas las actividades en las cuales se concentraran varias personas. Esto era parte de una medida sanitaria para reducir el riesgo de contagio del coronavirus”, rememoró.

Pero después, una de las concejales que lo había denunciado presentó un amparo. “Eso dilató todo otra vez, pero luego se presentó una denuncia porque estaban dilatando mi asunción, y, finalmente, me convocaron para jurar”, comentó el edil, electo hace casi 31 meses.

De la ceremonia, concretada el último miércoles a las 10, participaron los integrantes del cuerpo deliberativo y del Ejecutivo “respetando el uso del barbijo”. 

Por último, Ramírez lamentó “todo lo sucedido, pero lo importante es que se terminó reconociendo la voluntad de quienes me  confiaron -con su voto- el rol de concejal”.            (CC)