Las pecas son lesiones benignas: no comportan un trastorno ni una enfermedad de la piel. En general deben considerarse inofensivas y solo en casos muy raros evolucionan a un cáncer de piel.
Una piel pecosa suele ser, en la mayoría de los casos, una piel de fototipo bajo, es decir, una piel clara que produce un nivel reducido de melanina.
Los cuidados básicos para tomar el sol son los siguientes:
• Evitar el sol en las horas centrales del día, que corresponden con el tramo en el que el sol incide de forma más vertical (12:00 a 17:00).
• Hidratar la piel al menos dos veces al día.
• Proteger la piel de la radiación solar. La protección solar no se limita a la aplicación de filtros solares de uso tópico sobre la piel, sino que debe incluir la fotoprotección oral, mediante la ingesta de cápsulas ricas en antioxidantes que reduzcan la formación de radicales libres, así como el uso de prendas que actúen como barrera frente al sol (gorras, sombreros de ala ancha, sombrillas, prendas ligeras y de colores claros etc).
¿Qué protector solar recomiendan los dermatólogos?
Para el cuidado de las pieles con pecas, el protector solar que recomiendan los dermatólogos debe reunir 4 características fundamentales:
• Factor de protección alto. Los pacientes con fototipos bajos se queman fácilmente, por lo que deben utilizar un protector solar de factor alto (FPS 50).
• Amplio espectro. El filtro solar debe proteger de los distintos tipos de radiación, es decir, rayos UVA, UVB y luz infrarroja.
• Adecuado al tipo de piel de cada paciente. Hoy en día existen fórmulas específicas para pieles especiales, como antiinflamatorias para las pieles sensibles o no comedogénicos para las que presentan acné.
• Resistencia. Mejor cuanto más resistentes sean al agua, a la transpiración o al roce con la ropa.
Además, especialistas en Dermatología ofrecen consejos útiles sobre cómo aplicar correctamente el protector solar:
• Aplicar una buena cantidad. La cantidad de protector solar que necesitamos para cubrir bien el rostro es de unos 40 ml de producto, es decir, el contenido equivalente a una cuchara de postre colmada.
• Repartir bien el producto por toda la piel. No olvidar zonas como las orejas o los pies.
• Reponer con frecuencia. Al menos cada 2 horas y siempre después del baño.
Hidratar la piel después del sol
El objetivo de hidratar la piel después del sol es doble. Por un lado, aportamos sustancias hidratantes y nutrientes que restablecen la humedad y ayudan a reparar la epidermis. Por otro, se restablece el manto hidrolipídico, para favorecer la retención del agua en la piel. La hidratación en profundidad es un gesto que el paciente con piel clara y pecas debe realizar al menos dos veces al día.
Las mejores cremas hidratantes son las que poseen mayor concentración de principios activos como antioxidantes, humectantes, sustancias reparadoras y fijadoras del agua, como las siguientes:
Vitaminas E, C, B y B3
Ácido hialurónico
Ácidos grasos esenciales (Omega 3 y Omega 6)
Extracto de aloe vera
Urea
Péptidos de señal
Tengo pecas. ¿debo ir al dermatólogo?
Las pecas son lesiones pigmentarias benignas que pueden ser congénitas (de nacimiento) o adquiridas en la infancia o en la adolescencia. Por sí solas no tienen importancia clínica, aunque sí hay que consultar al Dermatólogo en caso de que se produzcan cambios como los siguientes:
Cambios en el borde, el color, el tamaño o la textura de las pecas.
Aparición de síntomas como picor, enrojecimiento, sangrado.
Aparición de otros tipos de manchas en la piel (léntigos, melasma, queratosis…)