A pesar de las abundantes lluvias caídas en San Luis del Palmar durante la semana, el intendente Néstor Buján dijo que no hubo inconvenientes. Aclaró que el Riachuelo no se desbordó debido a su bajo caudal.
“Llovió fuerte el jueves por la noche, para amanecer viernes. Llovió muy fuerte y de golpe y cayeron 130 milímetros. Los desagües estaban muy tapados y como llovió de repente, algunos barrios sufrieron por el agua acumulada”, explicó Buján a El Litoral. “Eso nomás fue”, sostuvo y destacó que las fotografías difundidas en redes sociales son de lluvias pasadas.
“La verdad es que hasta este sábado (por ayer) estuvimos trabajando. “Al principio hicimos una limpieza general y se subsanó todo. Nuestro riachuelo perdió su caudal y por eso pasan estas cosas también”, insistió.En algunas casas linderas al Riachuelo había mucho barro, y nada más. Asistimos a los habitantes y les dimos algunos medicamentos. El problema que tuvieron fue que no estaban con mucha agua potable”, aclaró.
Además, remarcó que solo llovió en la parte urbana de la localidad, no en la zona rural.
Sobre las lluvias que afectaron en febrero a la ciudad y generaron pérdidas en casas de familias, afirmó que “eso se subsanó. La mayoría de los inconvenientes generados están resueltos. Se asistió a más de 100 familias”.
El gobernador de Corrientes, Gustavo Valdés, arribó a San Luis del Palmar el 15 de febrero para resolver los problemas que se presentaron en su momento. “El punto más fuerte fue en San Luis del Palmar donde tuvimos lastimados y entre 50 y 60 viviendas afectadas”, había dicho el jefe comunal en ese momento.
Además, en aquel momento, el gobernador recorrió el hospital local para tomar contacto con las autoridades y personal del hospital, con el objetivo de conocer el desenvolvimiento y el trabajo realizado por los profesionales de la salud.