Expectativas renovadas

El sector arrocero de Corrientes atraviesa la etapa final de la campaña 2017/18, en el marco de una temporada que se presentó con altibajos, a raíz del clima. Un inicio de siembra tardío en muchos campos, a partir de las lluvias, retrasaron las labores y los tiempos de la actividad, donde esta semana comenzó el “grueso” de la cosecha en las zonas más importantes de la provincia. No obstante al retraso, las perspectivas son más alentadoras que en años anteriores.

El próximo 2 de marzo se realizará la apertura oficial de cosecha de arroz 2018, un evento organizado por la Asociación Correntina de Plantadores de Arroz (Acpa) donde se formaliza la cosecha gruesa del cereal en la provincia (ver aparte). No obstante, desde mediados de enero comenzó a levantarse la cosecha en algunos campos, principalmente en el Norte de la provincia, donde habitualmente la campaña comienza antes.

Como viene sucediendo desde hace al menos tres campañas, el ciclo agrícola arrocero no estuvo exento de las condiciones climáticas. Las lluvias de la primavera del año pasado retrasaron la siembra en muchos campos, y eso obligó a reprogramar todo lo demás.

“Esta campaña todavía viene con altibajos, efecto de ‘El Niño’, que nos sigue condicionando. Tenemos un retraso casi de 15 días en la cosecha, y esto marca que la siembra no fue en el momento óptimo”, explicó Pedro Tomasella, presidente de la Acpa.

No obstante, el retraso de la campaña no tendría efectos adversos en los rendimientos y la calidad del arroz correntino cosecha ’18. “Ha pasado en algunos años que las primeras fechas de siembra no han tenido los mejores rindes, porque no reciben el mejor clima. En este caso haber sembrado tarde no nos desfavorece, porque la radiación solar nos dio bien justo con el arroz madurando. Fue sin premeditarlo, pero vemos que hay segundas tandas de siembra que se dan mejor, sobre todo en calidad”, explicó el productor goyano.

El inicio de la cosecha en el Norte de la provincia fue sólo un indicio, ya que la mayor concentración de las 92 mil hectáreas de arroz que se siembran en Corrientes se encuentra en el Centro y Sur. Por eso, la cosecha gruesa recién arrancó en los últimos días, con el inicio de la zafra en los campos de Mercedes, Curuzú Cuatiá, Paso de los Libres, Monte Caseros, Alvear y La Cruz, entre otros lugares.

Nosotros llamamos iniciación de cosecha a un promedio de hectáreas ya cosechadas; si bien a mediados de enero comenzó la cosecha en el Norte, y el grueso de la cosecha se está dando a partir del 10 de febrero y hasta fines de este mes”, explicó Tomasella.

Las perspectivas comerciales para la campaña se conocerán en profundidad durante la jornada de apertura oficial de cosecha, en Paso de los Libres. Sin embargo, desde el sector son optimistas respecto a las previsiones para este año. Hay un contexto de muy bajo stock a nivel internacional; además este retraso en la cosecha también le da marco para esperar precios mejores al arroz”, explicó el titular de la Acpa, quien además agregó que “el corregimiento del dólar también va a colaborar, así que pensamos que es una campaña para esperar precios promedio sustentables”.

Más allá de estos valores que se esperan, el sector no puede salir del problema de costos que atraviesan sus actores, ya desde hace varias campañas. “Hay que ser muy minuciosos para ser competitivos. Los precios son una parte de la cadena de valor, porque después está el problema de los costos. No han parado de subir, sobre todo en materia energética y de fertilizantes, que son nuestros principales insumos. Hay que haber bien las cosas para ser sustentables”, explicó.

En este sentido, además de los incrementos del combustible que se utiliza para el funcionamiento de vehículos y maquinaria; como así también de los fertilizantes y productos agrícolas, también se ha generado una controversia respecto al precio de la energía. “La provincia avanzó muy bien en la reconversión de los sistemas de riego, que en su mayoría pasaron de ser a gasoil a ser eléctricos; Pero el problema es que esa reconversión vino con un incremento del 160% en dos años de la tarifa eléctrica. Es un problema a analizar junto a la Provincia”, señaló Tomasella.

En este sentido, cabe recordar que días atás, productores de arroz de Entre Ríos habían denunciado que sus costos por kilovatio de energía superaba ampliamente a los de sus pares de Santa Fe y Corrientes. No obstante a ello, el titular de la Acpa explicó que “con este nuevo aumento en Corrientes, y los logros que tuvieron en Entre Ríos, se equiparó bastante la tarifa en las dos provincias”.

Respecto a este problema, y al tratarse de una actividad donde hay que trabajar minuciosamente en cada punto, Tomasella comentó que “no podemos ajustarnos en otros eslabones de la cadena, porque es resentir el rendimiento. Tenemos que ir por tener un precio diferenciado en la energía. Por eso vamos a trabajar por una tarifa eléctrica  de riego agrícola. Que no puede marcar una diferencia en el consumo. Desde la Dpec nos informaron que no se puede tocar el precio de la energía de acá. Hay que gestionar de origen. Creemos que con un poco de voluntad de todos, se puede lograr”, sostuvo.

De este modo, la principal actividad agrícola extensiva de Corrientes continúa dando pelea a sus problemas de competividad, y si bien las previsiones son más favorables que otras campañas para este año, la realidad marca que los pequeños y medianos arroceros correntinos continúan desapareciendo, asechados por un cóctel de altos costos y bajos precios, y obligados a dejar de ser arroceros y reconvertir sus chacras a otras explotaciones más rentables en la actualidad.