Una cicatriz en el pavimento del centro para dirigir el agua de lluvia a un arroyo

El Gobierno de la provincia interviene con una gran obra a cielo abierto un sector neurálgico del centro de la ciudad de Corrientes para dirigir el agua que se acumula con las lluvias a un arroyo subterráneo.

Se trata de una reformulación de los sumideros de desagües pluviales de la intersección de las calles 25 de Mayo y Jujuy, en pleno centro de la capital.

El trabajo, desarrollado por el Ministerio de Obras y Servicios Públicos, tiene por objetivo disminuir el impacto que tiene la acumulación de agua en esa esquina ante cada lluvia.

Para eso, la obra consistirá en encauzar el caudal al ducto maestro del arroyo Poncho Verde, que corre por debajo de ese sector de la ciudad y se dirige al río.

Como consecuencia de los trabajos ese cruce permanecerá cerrado al paso vehicular por 20 días, informó la cartera de Obras Públicas.

En ese plazo se construirá un ducto pluvial de 60 centímetros de diámetro con una extensión de 50 metros, tendrá una cámara de vinculación, en tanto que se modificarán y ampliarán los sumideros existentes.

"Con esta obra se dará efectiva solución a un problema serio en la zona debido al lento escurrimiento de las aguas en época de lluvias tanto en lo acumulado en ese cruce como en calles aledañas", especificaron.