Según el transporte, ir a Buenos Aires puede costar entre $5 mil y $8 mil para dos personas

Por cuestiones laborales, personales y de cualquier otra índole, son constantes los viajes de correntinos a Buenos Aires y una muestra de ello son los tres vuelos diarios y la importante cantidad de micros que parten diariamente desde el aeropuerto local y la Terminal de Omnibus, respectivamente. A un mes del inicio de las vacaciones de invierno, llegar hasta la Capital Federal presenta una variada gama de opciones de traslado y también de costos.

Si bien los precios de los pasajes aéreos son variables, comprándolos con anticipación pueden costar incluso más barato que un boleto de colectivo, y no solamente contando a la empresa “low cost” que brinda el servicio. Es así que, tomando como referencia la segunda quincena de julio y volviendo los primeros días de agosto, volar a Buenos Aires a través de Flybondi cuesta aproximadamente $6.400 ida y vuelta para dos personas. Es decir, el precio promedio es de $1.600.

En este punto, vale aclarar que si bien los boletos más económicos son de $729 y algunos de poco más de $800, hay lugares disponibles recién para mediados de agosto, ya finalizado el receso invernal. Del mismo modo, se debe sumar varios costos extra al vuelo, que ronda para julio los $1.200.

Es que, al ser un servicio de bajo costo, no incluye el traslado del equipaje o la elección del asiento, lo que debe abonarse aparte. De esta manera, de llevar valijas, el precio asciende aunque sigue siendo una de las opciones más económicas para viajar a Buenos Aires. Asimismo, aterrizando en El Palomar, se debe tener en cuenta también el transporte hasta Capital Federal, que sería cerca de $300.

En tanto, la otra opción aérea es Aerolíneas Argentinas, con costos bastante más elevados en el corto plazo pero que se equiparan con Flybondi si se compran para dentro de un mes. De esta manera, los boletos oscilan entre los $1.600 y algunos que superan los $3.000. Así, ida y vuelta para dos personas significa un gasto mínimo de $6.400, aunque está incluido el traslado del equipaje. Además, hay que tener en cuenta que los aviones de la aerolínea nacional aterrizan en Ezeiza o Aeroparque.

Entonces, si el pasaje se compra con bastante tiempo de anticipación, la diferencia es clara a favor del servicio “low cost”, aunque se empareja en el mediano plazo.

Por tierra

La opción terrestre fue, históricamente, la más económica para viajar a Capital Federal desde Corrientes, aunque esta situación fue cambiando en el último tiempo a partir del nuevo servicio aéreo de bajo costo y los descuentos y promociones pagando el vuelo con anticipación. De cara al receso invernal del mes que viene, los pasajes en micro de larga distancia van desde los $1.500 hasta más de $2.000. De esta manera, hay unos $500 de diferencia entre un semicama y un servicio cama o premium que ofrecen algunas empresas. Así, ida y vuelta para dos personas puede costar entre $6.000 y $8.000.

Más allá de la diferencia de precios que en algunos casos puede no parecer significativa, uno de los factores que pueden inclinar la balanza es el tiempo de viaje. En este punto, vale decir que en colectivo se tarda un promedio de 12 horas, mientras que en avión el tiempo estimado es de una hora y media.

En auto

Los que tienen un vehículo propio cuentan con otra opción de viajar, que resulta ser la más económica comparándola con las otras alternativas mencionadas. El punto principal aquí es el gasto en combustible que, a pesar de haber subido varias veces en el último tiempo, sigue siendo más barato que pagar un boleto, sobre todo si son varias las personas que se trasladan hasta Buenos Aires.

Tras el ajuste, las naftas cuestan entre $32 y $34, dependiendo del grado de refinamiento. Teniendo en cuenta el consumo promedio de un auto, un conductor necesitará cerca de 146 litros para ir y volver a Capital Federal, lo que significa un gasto de entre $4.600 y casi $5 mil.

En este caso, podrían viajar hasta cuatro o cinco personas, por lo que el costo per cápita es bastante menor al que puede tener el avión o los micros. Además, muchos viajeros destacan la ventaja de, una vez llegados a destino, tener movilidad propia y ahorrar costos extras en transporte público para trasladarse, en este caso, en Buenos Aires.