En un concierto íntimo, Pedro Aznar hizo gala de su virtuosismo musical

Verónica Echezárraga

vechezarraga@ellitoral.com.ar

Intimo y retrospectivo, Pedro Aznar estuvo el domingo en Corrientes luego de tres años de ausencia. El concierto fue en el Teatro Juan de Vera donde fanáticos de distintas generaciones agotaron las entradas y disfrutaron de un show impecable, pero breve. Sobre el escenario, el artista hizo gala de su virtuosismo pasándose de un instrumento a otro con absoluta naturalidad, y en apenas una hora y media realizó un repaso de temas que marcaron los 35 años de su prolífica historia musical. 

Una extraordinaria versión de “Because” de The Beatles, incluida en su primer disco solista, fue la canción elegida por Aznar para inaugurar el domingo el show “Resonancia” en el coliseo correntino. Luces tenues sobre el escenario y humo vaporizado completaron la atmósfera de una noche marcada por la excelencia artística de uno de los íconos del rock nacional y ex miembro de Serú Girán.

El inicio de show no fue puntual y esto se debió quizás a una notable demora en la llegada del público que a las 21 (horario anunciado) apenas completaba el 50 por ciento del auditorio. El telón se levantó cuando el reloj casi marcaba las 21.20 con fanáticos aún acomodándose en sus lugares y se extendió hasta las 23.

“La resonancia requiere de dos objetos o personas que resuenan en consonancia”, dijo Pedro Aznar y enseguida agregó que las obras de arte o las canciones son una propuesta del artista que se completa con la mirada de las personas que la eligen. De esta manera, explicó el título de esta gira, en la que promociona el disco homónimo que incluye un EP con cuatro canciones nuevas y un disco doble de esenciales, en formato CD. 

Formaron parte de los primeros minutos del concierto “La noche sueña el día” del disco Contemplación (1985) y “Fotos de Tokyo” del álbum “Fotos de Tokyo” (1986). Le siguieron “Los Chicos de la calle” (disco David y Goliath de 1995) y “Barrio marginal” con la banda de sonido de la película No te mueras sin decirme a dónde vas.

La etapa folclórica del artista ocupó un lugar importante durante el espectáculo con canciones como “Soledad, Jujuy 1941”, “Muñequitos de papel” en la que Aznar brilló junto con su bajo,  “Romance de la luna tucumana” y “Tan alta que está la luna” para la que pidió el acompañamiento del público con palmas.

“A primera vista” y “Ya no hay forma de pedir perdón” fueron el cierre de una noche en la que el auditorio agradeció de pie la excelencia musical del artista.