Transporte escolar: en cinco años bajó un 40% la cantidad de vehículos habilitados

Los transportes escolares que funcionan en la ciudad recorren diferentes barrios y tratan de lograr la mayor cobertura posible. Más allá de esto, por diferentes motivos, en el último tiempo se dio un importante descenso en la cantidad de unidades que prestan el servicio. 

Consultado sobre esta situación, Pedro Abas, representante del sector, comentó a El Litoral que “en el padrón actual de los que están en condiciones de volver a ser habilitados hay 63 unidades”. Agregó que “hace cinco años teníamos conocimiento de que había cerca de 100 transportes prestando servicio en la ciudad”.

Con esta importante reducción en la oferta de los colectivitos se puede ver afectada la cobertura en algunos sectores. Al respecto, Abas opinó que “hay muchos que se suman al sector sin tener en cuenta las complicaciones que tiene, entonces trabajan un tiempo y después lo dejan”.

Asimismo, la situación económica y las dificultades para renovar las unidades pueden ser posibles motivos de la notable merma que se dio en los últimos años. 

En este contexto, las 63 combis que figuran en el padrón municipal deberán cumplir esta semana con el trámite de habilitación correspondiente, que les permitirá prestar servicio durante el ciclo lectivo 2020.

Entre varios otros requisitos, las unidades deben tener una antigüedad menor a diez años para poder circular legalmente, con lo que se pretende garantizar la seguridad de los alumnos cuando van y vuelven de la escuela. 

“Hay vehículos utilitarios que ofrecen el servicio de manera irregular y esto representa un serio riesgo para los chicos; los controles deberían ser más exigentes”, expresó Pedro Abas, haciendo hincapié en la competencia desleal. 

Mientras tanto, los transportistas escolares se preparan para comenzar la semana que viene un nuevo ciclo lectivo. La tarifa base será de $3.200 aproximadamente, aunque habrá seguramente variaciones dependiendo de las distancias que deben recorrer en cada caso. 

De cara al inicio de clases, los transportistas comentaron que algunos tutores empezaron a hacer consultas, sobre todo los que ya usaban el servicio el año pasado. Así, esperan comenzar con pasajeros ya conocidos y que con el correr de las semanas vayan sumándose nuevos, una vez que terminen los gastos iniciales de útiles y uniformes. 

Cobertura

Con respecto a la cobertura que tiene el servicio de colectivitos en la ciudad, desde el sector reconocen que quedan algunos puntos donde la oferta es escasa. Así, en los barrios más alejados del centro suele resultar más difícil conseguir transporte para los alumnos. 

Abas señaló que “el Pirayuí, Santa Catalina y los que están después de la rotonda de la Virgen son en los que circulan menos unidades”. Por esto a veces deben ajustar sus recorridos, pero evitando las demoras  para poder cumplir con los horarios.