Chaco: renunció la cúpula de la Policía y se acentúa la crisis en la vecina provincia

Luego de la renuncia presentada ayer por toda la cúpula policial del Chaco debido a que los cuatro policías de la Comisaría Tercera de Fontana no serán reintegrados y el pedido de la ministra de Seguridad de que todos sigan en sus cargos, el jefe de esa fuerza, Fernando Romero, desmintió un acuartelamiento de los efectivos en Jefatura.

Ante el desplazamiento de los cuatro policías imputados en el  allanamiento en el domicilio de una familia qom en Fontana y la renuncia de la cúpula policial, al cierre de esta edición, el jefe de la Policía, Fernando Romero, confirmó a Diario Chaco que la ministra de Seguridad, Gloria Zalazar, le presentó por escrito el pedido de que la cúpula policial continúe en sus funciones y que su renuncia fue “puesta en consideración”.

 Así, la cúpula policial continúa esperando la decisión formal por parte del Gobernador para conocer si continúan en el cargo o si su solicitud de renuncia fue aceptada. 

La renuncia fue presentada esta mañana por el jefe de la Policía, el subjefe Angel Domínguez y la directora Ejecutiva del Centro de Análisis Comando y Control Policial (Ceac) Mariela Aguirre, tras la decisión del Gobierno de no reintegrar a los efectivos involucrados en el violento procedimiento de Fontana. 

Acuartelados

Mientras que promediando la tarde y ante el rumor de un posible acuartelamiento en Jefatura por el personal que fue desplazado, el jefe de la fuerza provincial de Chaco, Fernando Romero, dijo: “Quiero desmentir el rumor de que la Policía se va a acuartelar. Nuestro reclamo es totalmente administrativo. Somos los responsables de la seguridad”, afirmó.

“Yo tengo que medir con la misma vara a los 7.700 efectivos. No miro qué causa sí, qué causa no; policía que recupera la libertad, debe reincorporarse al servicio”, aseguró Romero.

Por último, el funcionario policial le pidió a la comunidad chaqueña que “se quede tranquila que va a tener seguridad”.

Allanamiento

Vale recordar que los agentes de la Policía del Chaco que no serán reincorporados a la fuerza están imputados por ingresar sin orden de allanamiento a la casa de una familia de la comunidad qom, ubicada en el barrio Bandera Argentina, y golpear a quienes estaban en el interior. Entre ellos, mujeres, jóvenes y menores de edad.

El ataque se produjo con altos niveles de violencia y un grado de ensañamiento anclado en la discriminación racial, según lo demuestran los registros fílmicos de los propios damnificados.

El hecho ocurrió el domingo 31 de mayo, a las 4 de la mañana, en Fontana, una localidad cercana a la capital chaqueña, Resistencia. Varios agentes policiales ingresaron a las patadas a una vivienda humilde y golpearon a hombres y mujeres de la comunidad qom. 

Al parecer, buscaban a varios jóvenes que habrían apedreado la comisaría, que se encuentra a cuatro cuadras de allí.