Boca Unidos dio el batacazo al golear a Central y pasar de fase

Rubén Poletti

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Después de tanta desazón en 2020, Boca Unidos se dio el gusto de comenzar el nuevo año goleando anoche por 3 a 0 a Rosario Central para avanzar a los 16avos de final de la Copa Argentina y embolsar un cheque por 675 mil pesos.

El equipo correntino edificó una victoria tan justa como necesaria para poder arrancar con otro ánimo su participación en el próximo Torneo Federal A, ya que el principal objetivo del “Aurirrojo” sigue siendo volver a la Primera Nacional.

Boca Unidos sorprendió a Central desde el inicio. Monje cortó una pelota en zona defensiva y cedió a Medina -la figura del partido- quien recibió pasando mitad de cancha. El ex Central observó que Ríos le marcó el pase haciendo la diagonal del medio hacia la izquierda del área y allí fue el pase magistral. Gonzalo punteó la pelota, Miño se lo llevó puesto y el Tony lo transformó en gol con un impecable remate engañando al arquero.

El “Canalla” se sintió tocado y fue en busca de la igualdad. Pero se encontró con un equipo correntino bien plantado en su campo, que le dejaba pocos huecos para penetrar. Lo más interesante de Central pasaba por las continuas subidas de Martínez, transformado más en un mediocampista con vocación defensiva que en un lateral.

Precisamente, Central llegó con un centro de Martínez al primer palo que Ojeda alcanzó a desviar con dificultad, pasando la pelota cerca del vertical izquierdo del arquero correntino, que no obstante controlaba bien el disparo.

Los dirigidos por Marini eligieron esperar y contraatacar a través de los delanteros chaqueños. Un anticipo de cabeza de Ríos encontró a Medina, que dejó picar y sacó un zurdazo que bajó muy cerca del travesaño.

A partir de los veinte minutos el dominio de Central se hizo ostensible, pero no podía generar jugadas de gol ante un equipo correntino que defendía con uñas y dientes la ventaja.

Una nueva vacilación en el fondo rosarino terminó con el segundo gol de Boca Unidos. Bottinelli cortó una pelota en defensa y ante el apremio de Medina quiso jugar hacia atrás para su arquero, pero el Tony adivinó la intención, lo trabó y se quedó con la pelota para meterse en el área, dejar desairado al cruce de Laso y ceder mansita para que Ríos empuje la pelota al gol de frente al arco ante un indefenso Miño.

En los correntinos, Monje se lesionó y en su lugar Marini dispuso el ingreso del juvenil Niz. 

En la cancha, Boca Unidos esperaba cómodo a Central, que tenía la posesión pero no podía acercarse con peligro al arco correntino. Así pasaron los minutos, y en la última acción del primer tiempo, Laso ganó arriba de cabeza tras un tiro de esquina y Martínez levantó la mano para enviar la pelota por encima del travesaño. 

En el complemento todo siguió siendo más o menos igual, aunque a Boca Unidos se le presentaron más situaciones para ampliar la ventaja, debido a que Central  perdía más pelotas en ataque en su apuro por descontar.

En una de las primeras acciones de la etapa, Medina encabezó una contra, cediendo hacia la derecha para Ramírez, que no pudo cruzar bien el remate que terminó atajando Miño.

Un recurso que comenzó a utilizar Central, al  no poder llegar con peligro al área, fue el remate de media distancia. El ingresado Villagra probó dos veces, en la primera la pelota se fue apenas por arriba del travesaño, y la restante, el arquero Martínez atajó con seguridad.

El “Kily” siguió moviendo el banco, jugándose entero por el descuento, que estuvo muy cerca. Pasada la media hora, Vecchio cedió para la entrada de Martínez, que sacó un violento derechazo que sacudió el travesaño. El rebote le cayó a Martínez Dupuy, que atinó a colocar la pierna, saliendo la pelota apenas ancha. La suerte comenzó a jugar también para el equipo correntino.

En una acción de VAR, Russo -en posición dudosa- ganó de cabeza en el área, obligando a Martínez, que estaba adelantado, a retroceder. El arquero, en lugar de enviar el disparo por arriba del travesaño, atrapó el balón con el cuerpo adentro del arco y las manos hacia adelante sosteniendo la pelota. Mastrángelo, de buen arbitraje, observó al línea, que dejó seguir, cuando dio toda la impresión de que la número cinco había traspasado la línea.

Enseguida, Boca Unidos definió el partido. Ríos ganó una pelota larga y habilitó a Medina, quien ingresó al área perseguido por Bottinelli. Pícaro, el Tony desaceleró y esperó el cruce del defensor, que lo tocó en la pierna izquierda. Nuevo penal, que esta vez estuvo a cargo de Ramírez, que anotó con un disparo al centro del arco.

En los últimos minutos, Marini movió recién el banco para que pase el tiempo y oxigenar piernas cansadas, y Central se debatió en su propia impotencia, llegando el pitazo final de Mastrángelo para el festejo correntino, que fue ordenado, práctico y contundente, ante un rival que nunca le encontró la vuelta al partido. 

En el camino ahora aparece Godoy Cruz de Mendoza, al que deberá enfrentar en la próxima instancia, buscando por primera vez sortear los 16avos de final del certamen federal e integrador, partido cuya fecha y sede deberá determinar la organización.