Marchan en reclamo de justicia y buscan pistas de una brutal golpiza

Familiares y amigos de Jonathan Alejandro Herrera, de 28 años de edad, el joven de Alvear que está internado muy grave a causa de severos golpes en la cabeza, marcharán esta tarde desde la plaza 9 de Julio de aquella localidad para pedir justicia.

Tamara Castro, la hermana de Alejandro, que se encuentra internado en el Hospital Escuela de Corrientes tras el confuso hecho, pide que se investigue lo ocurrido en la madrugada del pasado 14 de enero. Su hermano tuvo primero un accidente de tránsito en su motocicleta y le diagnosticaron lesiones leves, pero 5 horas más tarde apareció con gravísimos golpes, luego de que policías lo llevaran a la casa de un vecino de Alvear. 

La mujer presentó una denuncia y junto con su abogado exige celeridad en la investigación. En una entrevista con Digital Santo Tomé insinuó que “se estaría tratando de enmascarar el hecho como un simple accidente de tránsito”, pero asegura que “las lesiones que tiene no corresponden a un siniestro de esas características”, ya que su hermano llevaba colocado el casco al momento del siniestro, aseguró. 

También denunció la posibilidad de que el médico de guardia del hospital de Alvear no haya tomado los recaudos correspondientes y dio de alta a ambos involucrados en el accidente con un certificado médico de lesiones leves, siendo que ambos tuvieron que volver horas más tarde a ser atendidos por lesiones de considerable gravedad. 

Para esta tarde a las 18 convocaron a una marcha pacífica que partirá de la plaza 9 de Julio de Alvear, mediante la cual buscan hacer oír su reclamo de justicia. Avisaron que asistan con barbijos y respetando las medidas sanitarias.

Sin luz

El día del accidente de Herrera “estábamos sin luz en Alvear”, contó Tamara Castro, quien agregó que quedó sin batería ni señal en el teléfono celular y por la mañana se “comunicó una tía mía con mi esposo para decirle que buscaban hablar conmigo porque mi hermano no estaba bien y le habían dejado en casa de un familiar lejano”.

“Cuando llego al lugar, el dueño de la casa me dice que la Policía lo dejó ahí a las 4:30 porque supuestamente cayó de la moto”, y “me informa que le habían dejado de la manera en que se encontraba; lo veo acostado boca abajo, lo toco, trato de que reaccione... Hace un breve movimiento, me mira y veo que su cara estaba totalmente desfigurada, tenía los ojos hinchados y morados, toda la nariz con sangre y la boca hinchada”, describió.

Añadió que al no poder subirlo, pidió ayuda a su hermana y entre las dos lo llevaron otra vez al hospital local “que queda a una cuadra y media. Estaciono, pido auxilio, viene un enfermero, observa la situación y llama al doctor; vino el médico y nos pide que le contemos qué le paso; para eso eran las 08:30, 08:45 de la mañana”, relató. 

Aclaró que su hermano estuvo en el mismo hospital “a las 3:30 por un accidente de moto contra otro chico, pero en esa ocasión el médico de guardia, el doctor Ortega, los atendió y expidió un certificado donde determina lesiones leves. Lo entregan a la fuerza policial pidiéndole que lo lleven a su domicilio, que solamente tenía que descansar”, contó. 

Relató que “lo llevaron a la sala de rayos, le hicieron placas y el médico nos dijo que no veía ninguna fractura sobresaliente, que necesitaba un estudio más complejo, por lo que fue derivado a Santo Tomé, donde ingresó e inmediatamente le hicieron una tomografía que arrojó como resultado que él tenía una fractura craneal frontal y daño cerebral con hemorragia”. 

“A partir de entonces tenemos dos certificados médicos distintos, uno de las 3:30 de la madrugada donde el médico de guardia del hospital de Alvear diagnostica lesiones leves por un accidente de tránsito, y otro en Santo Tomé que advierte las fracturas.

Entendemos que algo raro pasó en el medio de todo eso, y queremos saber exactamente qué es lo que sucedió”, remarcó.

(WA)