Ciclo teatral gratis con “Los perros”, “Tiempo de las mandarinas” y “La polaquita”

Con la obra “Los perros”, el 30 de octubre próximo a las 21.30 se realizará la reprogramada inauguración del ciclo de teatro del Museo de Artesanías y Folclore que debía hacerse el domingo pasado. El ciclo continuará el 31 a las 20.30 con “El tiempo de las mandarinas” y el cierre tendrá lugar el 7 de noviembre con “La Polaquita, guaynita rubia tataré”. La actividad es organizada por el grupo de Teatro del Guarán y el Gobierno provincial, y el acceso es gratuito. 

El Gobierno de Corrientes, a través del Instituto de Cultura, presenta un nuevo espacio cultural en el Museo de Artesanías y Folclore. La actividad inaugural debía realizarse el domingo último, pero fue reprogramada por razones meteorológicas Por esta razón y tratando de cumplir con el público, la misma se hará el sábado 30 de octubre a las 21.30 con la obra “Los perros”, un grotesco regional escrito en el año 1982 por Carlos Schwaderer. Esta pieza es una síntesis preclara de un país que salía del cono de oscuridad, marcado por la última dictadura militar. No obstante haber sido escrita hace casi 40 años, el texto no pierde vigencia. 

El argumento de la obra tiene lugar en el interior del Chaco, año 1978, en un pueblo chico. Una perrera municipal. Los empleados son el Viejo, el Fresquito y el Manchado, quienes se preparan para comenzar su jornada de trabajo. Así comienza esta historia que paulatinamente, de una aparente rutina diaria, va trocando a una tragedia que sirve de alegoría de las atrocidades que se cometen desde el poder. El elenco está conformado por Ángel Quintela en la piel del Viejo, Sergio Niz como Fresquito, Guillermo Vallejos en el papel de Manchado y Francisco Fernández como “El Jefe”, todos bajo la dirección de Ángel Quintela. 

Para el domingo 31 a las 20.30, siempre en el Museo de Artesanía y con acceso gratuito, se podrá disfrutar de la obra “El tiempo de las mandarinas”. Una mirada sobre las mujeres que ya no están, las que conforman la cuenta pendiente de nuestra sociedad. 

Fantasmas de mujeres, recuerdos de mujeres. Jirones de sueños componen este texto que indaga, sin ser testimonial, sobre los dolorosos caminos que quizás siguieran aquellas mujeres que hoy faltan. 

Rafael Nofal despliega en escenas cerradas en sí mismas que luego serán conectadas por el espectador, un universo de posibilidades que también son incertidumbres, sobre mujeres ausentes físicamente pero que sobrevuelan en forma permanente la conciencia de nuestro pueblo. 

Esas mujeres que ya no están nos interpelan desde su ausencia. Su fuerza vital se hace presente cada vez que se las nombra: Marita Verón, María Cash y tantas más, resurgen para preguntarse y preguntarnos sobre su destino de desaparecidas recientes. A partir de sus historias, Rafael Nofal escribió “El tiempo de las mandarinas”. La propuesta escénica apunta a crear un espacio desde el recuerdo de las mujeres, que salta en el tiempo a presentes, pasados y futuros. Actúan: Valeria Amable, Laura Quiñones y Rocío Gurás. 

El cierre del ciclo será el 7 de noviembre a las 20.30 con la puesta en escena de “La Polaquita, guaynita rubia tataré” y tendrá lugar en las escalinatas del Teatro Juan de Vera. 

El texto es de María Esther Aguirre, que la define como “espectáculo de teatro cuento”, tiene una estructura en donde están presentes actuaciones teatrales y muchos relatos de “la ficción y no tan ficción” que ponen en valor memorias de la infancia. El personaje de la actriz presenta el espectáculo y desde ese momento empieza a develarse la vida de la “Polaquita”, hilvanando una tras otra las historias que tienen que ver con este personaje muy querible que, entre relatos, canciones y con el gesto más cotidiano del mundo, nos cuenta cómo llegó hasta el lugar a contar esas historias, la sucesión de palabras irá conformando un mundo atizando la memoria de un fogón o un patio familiar. 

La dirección de este espectáculo es de la misma María Esther Aguirre, que cuenta con la asistencia en dirección y técnica de Ángel Quintela, Adriana Quintela y Emilia Quintela. Asimismo, la gráfica es de Gabriela Quintela. La obra cuenta con el apoyo del Instituto Nacional del Teatro. 

(VAE)