Hallaron un cuerpo y analizan si es el del empresario desaparecido

La Prefectura de la ciudad entrerriana de Concepción del Uruguay encontró un cuerpo en la madrugada del domingo a la altura del kilómetro 163 del río Uruguay, tras lo cual se inició una investigación para determinar su identidad y si se trata del empresario Eugenio Schneider, buscado desde hace tres días en la ciudad uruguaya de Paysandú.

Así lo informó la Armada de Uruguay en un comunicado de prensa en el que señaló que la desde la Prefectura de Concepción del Uruguay un jefe “se comunicó con el prefecto del puerto de Paysandú” para reportar el hallazgo de un cuerpo en la costa argentina que “según complexión física y descripción podría coincidir con el de la persona buscada”.

Indicó además que ya fue informado del hallazgo “la familia y el Cónsul argentino para poder reconocer efectivamente el cuerpo” y que esta era la información que había dado el organismo naval de la localidad entrerriana a la de Paysandú.

Eugenio Schneider de 81 años fue reportado como desaparecido el jueves cuando salió de su vivienda en la localidad uruguaya de Casa Blanca.

“Me voy al río”, dijo a sus allegados. Se refería al río Uruguay, que corre frente al pueblo Casa Blanca, ubicado a unos 17 kilómetros de Paysandú.

Schneider, de nacionalidad argentino-alemana, “es un hombre con múltiples facetas: empresario exitoso, escritor, alumno de Jorge Luis Borges en la UBA, amigo de presidentes, dueño de una profusa cultura e ingenio y nadador incansable”, lo describe el diario El País de Montevideo.

Es dueño del frigorífico Fricasa, que compró en 2000. Schneider, lo transformó en un negocio que exporta a decenas de países.

Hasta 2015 el frigorífico tenía un valor de 35 millones de dólares, ocupaba el 3,5 por ciento de la matanza de todo Uruguay, abastecía a 18 carnicerías propias y contaba con habilitación para exportaciones en todo el continente y Europa.

.”No creo que mi negocio pueda ser manejado por el gerente de una multinacional. Por eso, no vendo. Sería como vender carne humana. Trato de imaginar una empresa que siga funcionando armónicamente cuando corra el rumor de mi muerte”. Eso dijo en el 2015 durante una entrevista con el diario uruguayo El País y sus palabras toman otra relevancia por estas últimas horas.

“Él ya no nadaba. Tuvo Covid-19 y hacía poco que se había recuperado totalmente. Esta incertidumbre nos deja muy mal a todos. Es muy querido por acá”, había contado a El País un empleado del frigorífico.

Las ropas de Shneider habían sido halladas en la bajada que tiene su vivienda sobre el río Uruguay según fuentes de las investigación en la causa que tiene a su cargo la fiscal letrada de Segundo Turno de Paysandú, Estela Long. 

(EN)