El gobernador de Chaco, Jorge Capitanich, formalizó la decisión de hacer cumplir las restricciones contra la segunda ola del coronavirus mediante el corte de los servicios públicos en aquellos domicilios donde no se cumplan las normas sanitarias.
Además de adherir a las nuevas disposiciones que fijó la Casa Rosada para tratar de desacelerar el ritmo de los contagios, el gobernador chaqueño decidió implementar una “disposición especial” para sancionar a quienes no acaten las medidas.
Mediante el decreto 792/21 estableció que “las empresas del Estado prestadoras de servicios públicos estarán facultadas a interrumpir el servicio en aquellos inmuebles en los que, además de incumplir con la restricción de eventos, se registren irregularidades o alteraciones en la declaración de categoría de usuario o en la potencia declarada”.
Al respecto, se precisó que será el Ministerio de Seguridad y Justicia el encargado de realizar los controles para detectar irregularidades y solicitar el corte de los servicios públicos.
El procedimiento que definió Capitanich indica que los responsables del área de Seguridad deberán notificar “a la empresa prestataria la infracción cometida, identificando el responsable y la ubicación del inmueble”.
Además, remarcó que “la reconexión del servicio se hará efectiva una vez que se acrediten las sanciones o multas aplicadas”. La medida forma parte de un paquete de acciones con las que Capitanich trata de minimizar el impacto de la segunda ola del coronavirus en el Chaco.
(JML)
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En el primer día de vigencia de las medidas sanitarias ante la segunda ola de coronavirus, los controles a la circulación de las personas se centraron en los pasos que conectan la Ciudad de Buenos Aires con los municipios bonaerenses.
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