Un paraje se quedó sin acceso a la escuela y la capilla porque alambraron un camino

El 28 de julio del 2012, un grupo de pobladores de Rosado Grande (Pando) denunciaron que particulares cerraron un camino que ellos utilizaban para ingresar a sus viviendas, ir a la capilla y a la escuela Nº 510.  El caso se judicializó y en septiembre del 2018, el Superior Tribunal de Justicia (STJ) ratificó un fallo que permitía la libre circulación de los vecinos por esa vía de comunicación terrestre. Pero 11 meses después, los lugareños volvieron a exponer que les cerraron el paso.

En aquella oportunidad, finalmente se llegó a un acuerdo entre los habitantes y el propietario del campo por el cual pasa el camino.

Sin embargo, ayer, los pobladores manifestaron que nuevamente una persona colocó un alambrado que impide que usen la mencionada carretera. 

“Se contactaron con nosotros, nos expresaron cuál es el problema y además hicieron referencia a los fallos judiciales, el último del STJ, que habilita el uso público de ese camino”, expresó el vocal primero del directorio de la Dirección Provincial de Vialidad, Mario Encina Marín en diálogo con El Litoral. Tras lo cual acotó que también dialogó con el dueño del campo donde se colocó el alambrado.

Tras escuchar a ambas partes, “desde Vialidad Provincial nos comprometimos a que ni bien se levanten las restricciones vigentes debido a la pandemia de covid-19, nos vamos a trasladar hasta allá”, adelantó Encina Marín. A lo que agregó:  “Personalmente participaré de una reunión en la que se propondrá al propietario del inmueble que abra el paso por ese camino y el Gobierno de Corrientes solventará los trabajos para alambrar ambos lados de la carretera y de esa forma se evitará que el ganado salga a la vía pública o ingrese a otra propiedad”.

 (CC)