Boca Unidos consiguió ante el líder un triunfo tan importante como necesario

Rubén Poletti

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Y un día la racha adversa que Boca Unidos venía arrastrando llegó a su fin. El equipo aurirrojo volvió a gritar después de mucho tiempo el sapucay del triunfo al superar por 2 a 1 a Racing de Córdoba, que llegó a Corrientes como único puntero de la zona B, en uno de los partidos que completaron ayer la decimoctava fecha del torneo Federal A.

El conjunto local se plantó desde el inicio de igual a igual ante el sólido líder, sin que se noten los 18 puntos de diferencia que existía entre uno y otro equipo antes de jugarse la fecha.

Luego de algunas aproximaciones, el que inquietó primero fue la visita. Parodi, como luego lo hizo toda la tarde, ganó en lo alto para cabecear por arriba del travesaño una pelota que llegó al área correntina de un tiro de esquina.

Un minuto después contestó el local. Gabriel Morales, nuevamente el mejor jugador de su equipo, jugó una pelota profunda para Salom, que ganó entre los centrales rivales y sacó un derechazo que se fue apenas alto.

Con un gran trabajo en la recuperación de Sánchez Paredes, Boca Unidos fue quedándose con la lucha en la mitad de la cancha, haciendo daño por la izquierda de la ofensiva, cada vez que Arriola encaraba a su marcador.

Un buen encuentro entre Ríos, “Gabi” Morales y Luna, terminó con un zurdazo del ayer lateral derecho, que buscó el segundo palo del arquero Rodríguez, yéndose ancho el remate.

Era el momento de Boca Unidos, que no desaprovechó la chance que tuvo. Leani descargó con Arriola, que superó en velocidad a su marca y echó un centro al primer palo que fue a buscar Ríos con Albertinazzi. El defensor alcanzó a despejar corto, pero el rebote le quedó a “Gabi” Morales, que como venía puso el 1 a 0 enviando la pelota contra el palo derecho.

Racing no tuvo reacción, careció de juego para abastecer a sus delanteros, y sólo preocupó con alguna que otra pelota parada. La única acción de peligro que tuvo antes del cierre de la primera mitad fue un tiro libre cerca del área que Rivero remató desviado.

Hernán Medina, el DT de Racing, dispuso un doble cambio en el entretiempo para buscar que su equipo mejore su rendimiento, con los ingresos de Gamerone y Schiavoni.

Después de un remate de media distancia de Morales que atajó abajo Rodríguez, la visita avisó con un tiro libre de Giménez que al arquero Martínez, en el único error de la tarde, se le escurrió entre las manos, yéndose la pelota al córner. Un minuto después, el recién ingresado Gamerone envió un centro, y Parodi se anticipó a la marca de Ariel Morales para meter un cabezazo bombeado que ingresó cerca del ángulo superior derecho para establecer el empate.

Lejos de caerse, Boca Unidos fue nuevamente en busca del desequilibrio. Arriola volvió a desbordar, pero el centro del saladeño fue cabeceado exigido por Salom, yéndose la pelota por arriba del horizontal, en una muy clara situación para anotar.

Del otro lado, Racing siguió complicando con los envíos aéreos. En uno de ellos, Parodi volvió a ganar por arriba, pero en gran reacción, Martínez tapó el cabezazo que tenía destino de gol.

Unos minutos después, Giménez recibió la segunda amonestación por una infracción a Morales, y la visita se quedó con un hombre menos. Enseguida saltó a la cancha Fassino para ocupar la posición del expulsado, retirándose Martínez.

Del banco correntino entraron Peralta y Niz por Arriola y Ríos. El partido cayó en un pozo, porque a pesar de la superioridad numérica, el orden defensivo de Racing y la falta de ideas le impedían a Boca Unidos llegar con peligro al arco de Rodríguez.

La salida de Parodi (entró Villegas) fue un alivio para la defensa correntina, ante un equipo visitante que vio que el empate no era un mal negocio. El ingreso de Rinaudo por Fernández privilegió sostener el resultado y buscar acertar con algún contraataque.

Contra todos los pronósticos, fue la visita que estuvo cerca del desequilibrio tras un desborde por la izquierda que Gamerone peinó, y Schiavoni se anticipó a Leani para conectar de zurda ante la salida de Martínez, yéndose la pelota pegada al vertical derecho.

Sin embargo, el que terminó gritando gol fue el equipo correntino. Con el tiempo cumplido, Ramiro Schweizer, que entró en lugar de su hermano, Ataliva, ejecutó un tiro libre en tres cuarto de cancha, Salom peinó la pelota, y por el segundo palo Niz empujó la pelota a la red.

Los cuatro minutos más que se jugaron fue un calvario para Boca Unidos, que finalmente pudo aguantar el resultado para volver a festejar un triunfo después de mucho tiempo.

Porque hace mucho no sumaba de a tres puntos, y por la calidad del rival, Boca Unidos consiguió ayer un triunfo tan importante como necesario para dejar atrás una mala racha y comenzar a pensar en un futuro mucho más promisorio.