En los minutos finales de un partido muy peleado entre ambos equipos, una jugada dudosa en el área de Mandiyú generó una riña entre los jugadores contra el árbitro.
En dicha bataola, el reportero del diario El Litoral Marcos Mendoza, recibió golpes por parte de algunos jugadores que se cruzaron al sector destinado para la prensa. Por suerte el trabajador se encuentra en buen estado de salud y no debió ser asistido.
La situación se puso más tensa cuando ingresó la policía a tratar de llevar tranquilidad entre los deportista , lo que provocó que hinchas del Albo ingresen al campo desde las tribunas.
Minutos después, efectivos de la fuerza pública ingresaron a las tribunas de ambas parcialidades para tratar de controlar la situación que para ese momento estaba completamente desbordada.
Testigos del hecho afirmaron al ellitoral.com.ar que se escucharon algunas detonaciones por parte de la fuerza.
El partido quedó suspendido hasta nuevo aviso. Hasta el momento no se informó si hay algún herido.
