Comenzaron a demoler el predio ubicado en el puerto donde desempeñaban su trabajo los puesteros. Tras su traslado a la avenida Pomar al 800, el Municipio empezó a desarmar los puestos que se encontraban en la costanera.
Los trabajos de demolición de la estructura que albergaba a los 57 comerciantes se iniciaron ayer luego de que los vendedores se retiraran del sitio. El traslado se realizó durante el martes y miércoles debido a la gran cantidad de mercadería. Algunos puesteros eligieron llevar parte de la mercancía a sus casas y luego mudarse hasta acondicionar el nuevo lugar de ventas.
El mercado en el puerto funciona hace 35 años, antes estaban ubicados por el mercado de Junín. Las obras tendrán 9 meses de duración y luego los puesteros podrán regresar al mismo lugar.
Según el proyecto, los trabajadores estarán ubicados en la planta baja y en el primer piso habrá emprendimientos gastronómicos, con salidas independientes. La obra tendría un costo cercano a los 200 millones de pesos, y la idea es que funcione de manera independiente a los locales polirrubros. Estas obras serán llevadas adelante por el Gobierno provincial por Circuito Histórico y Cultural Ñandereko.
