Platos típicos de seis colectividades fueron expuestos en la gran feria de sabores que se realizó ayer en el parque Cambá Cuá. Cientos de vecinos se congregaron en plena tarde para degustar las propuestas gastronómicas de las diferentes naciones del mundo que residen en la ciudad de Corrientes.
En una jornada muy calurosa, capitalinos y turistas visitaron el parque Cambá Cuá, donde se ubicaron distintos stands de las comunidades paraguaya, venezolana, mexicana, peruana, italiana y japonesa. Exhibieron los múltiples platos típicos elaborados por integrantes de las distintas asociaciones que residen en la capital correntina.
Con una variedad de colores y sabores, la propuesta de Paraguay invitaba a probar la tradicional sopa paraguaya, el chipá guazú y la mazamorra hecha con caña de azúcar. En el puesto paraguayo también se expusieron trajes típicos, libros de literatura y hasta plantines de graviola (corazón de indio).
Bernarda Guirlan dijo a El Litoral que “nosotros nacimos en San Ignacio Guazú. Hace 19 años que vivo acá y formamos parte de la Casa Paraguaya en Corrientes y queremos mostrar una parte de nosotros”.
En un extremo de la feria se encontraba el puesto de Japón, cuyos vendedores atendían al público vestidos luciendo sus kimonos. Entre los platos salados más buscados por los concurrentes estaban a la venta los rolls de sushi y entre los postres dulces se destacaban los dorayaki.
Entre las regiones italianas, los piamonteses ofrecían una variedad de degustaciones como escabeches, licores, ajíes, embutidos, grappamiel, limoncello, libros de recetas de comidas italianas.
El presidente de la comisión piamontesa de Corrientes, Edgardo Gagliardone, contó a El Litoral que “solo en Capital somos 80 miembros. Se llama Piamonte porque la región se ubica al pie de los montes, entonces las comidas son elaboradas con mucho condimento y las bebidas son bastante fuertes”.
Otra de las propuestas del país italiano fue la Sociedad Dante Alighieri, que cuenta con una sede central en Roma y 500 comités distribuidos en distintas partes del mundo.
El stand estuvo integrado por los miembros de la comunidad italiana que, por un lado, se encargaron de dar a conocer datos institucionales y, por otro, también exhibieron el aspecto cultural y gastronómico.
La exposición de la colectividad mexicana contó con artesanías, entre las que se destacaron las calaveras (catrinas), trajes típicos, comidas y sabores de bebidas clásicas como tamarindo, jamaica y horchata. En cuanto al stand de Venezuela una larga fila esperaba para probar las tradicionales arepas realizadas por una familia que reside desde hace 13 años en la capital correntina.
(VT)
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