Por Ricardo “Caíto” Leconte*
Especial para El Litoral
El Club de la Libertad cumplió ocho años, los aniversarios son momentos de balances y análisis del camino recorrido.
Inició sus actividades en un momento en que las ideas de la libertad se encontraban dormidas o tapadas por la propaganda del intervencionismo y el dirigismo, que gozan de tanta valoración en la Argentina de los últimos setenta años a pesar de sus resultados negativos, que perjudican a toda la sociedad, hoy con índices de pobreza que superan el 50 por ciento.
Los directores del club, amigos provenientes de las más variadas actividades, nucleados por nuestro presidente Alberto Medina Méndez, que tuvo esta inspiración y nos motivó, reconociéndonos herederos de Alberdi, nos propusimos recorrer un camino que lo sabíamos difícil, pero no menos desafiante y necesario: divulgar las ideas de la libertad, contrarrestar, en lo mínimo que sea, la avanzada antiliberal que goza de prensa y además ha captado los claustros educativos.
En este camino hemos contado con el apoyo de muchas instituciones, think tanks, académicos, economistas, empresarios, estudiantes, voluntarios. Sin el apoyo de todos ellos este camino hubiera sido imposible de recorrer; gracias a todos ellos.
Luego de ocho años, en la Argentina hay un despertar del liberalismo, voces en todo el país y representantes en la política que buscan implementar las ideas que como fundación hemos tratado de difundir.
Y ahí está la clave, ahí está el propósito hecho luz, el sentido es transitar el camino de difundir las ideas, no es la meta, sino el camino que nunca se acaba, pero que nos lleva a cumplir con la máxima de Jefferson, “el precio de la libertad es su eterna vigilancia”. En esa tarea nos encontrarán los años por venir.
El Club de la Libertad seguirá en esta tarea, intentando correr el velo, despertar a uno por uno de ser necesario, para que puedan ver los beneficios de la libertad, que en definitiva es el mandato de nuestra Constitución liberal de 1853, que busca la protección de los derechos individuales contra la prepotencia y arbitrariedad del Estado. Y que reza en el preámbulo: “¡Asegurar los beneficios de la Libertad!”.
* Director del Club de la Libertad.
