Se celebró ayer en la iglesia Catedral de Corrientes la solemne vigilia pascual, donde monseñor Andrés Stanovnik llamó a “ser misioneros de la esperanza y la unidad “ en esta Pascua.
Cada Sábado Santo se conmemora la resurrección de Jesús y el arzobispo de la provincia llevó un mensaje a los fieles.
“Como creyentes en Jesucristo resucitado seamos misioneros de la esperanza, luz en medio de las tinieblas, sobre todo allí donde hay hermanos y hermanas que sufren por la falta de alimento, de abrigo, de una palabra cercana y amiga”.
Stanovnik señaló que “en nuestra ciudad hay cada vez más personas en situación de calle, que reclaman nuestra presencia cristiana y, sobre todo, la acción humanitaria de los organismos públicos”.
Además pidió a los creyentes que en el saludo de Pascua “comuniquemos desde lo más profundo de nuestro corazón”, sin olvidar a “tantos hermanos y hermanas que fueron marcados por el dolor a causa de la pandemia y a los que sufrieron las consecuencias de los incendios, a la vez que recordamos conmovidos tantos gestos de entrega y de extremo heroísmo que hubo durante las mencionadas crisis”.
En su homilía, Stanovnik remarcó la importancia de “renovar nuestro bautismo es decirle a Dios que estamos decididos a caminar juntos y a estar atentos a todo aquello que conspira contra esa nuestra vocación y misión”. Cerró su mensaje pidiendo por “la autenticidad de nuestra celebración pascual, la sinceridad de nuestra alegría por Jesucristo resucitado y la coherencia de nuestro saludo pascual serán verdaderos si también ellos lo pueden experimentar junto con nosotros”.
(IRB)
