La fundación argentina No Me Olvides busca escuelas correntinas para apadrinar. En Corrientes ya son dos las instituciones bajo su contención. Deben llevar el nombre de un soldado caído en Malvinas.
La institución está conformada por madres de caídos en la Guerra de Malvinas, veteranos, padres, hijos de excombatientes, centros que representan a veteranos, instituciones educativas y de salud y personas que sienten su lucha como propia.
El objetivo es promover y fortalecer la calidad de vida de las personas que padecen estrés postraumático originados por las vivencias en la guerra. Pero también buscan mantener viva la memoria de aquellos años a través de proyectos educativos y socioculturales.
“La fundación trabaja por apadrinar a las escuelas que lleven el nombre de un soldado caído en Malvinas”, contó a El Litoral, Mabel Miranda, directora de la Escuela “Héroe de Malvinas Ramón Cirilo Blanco” del paraje Arroyo Pontón, del distrito San Luis del Palmar.
En la provincia, esta es una de las instituciones que lleva el nombre de un excombatiente, pero la primera fue la Escuela 216 “Gabino Ruiz Díaz”, de Colonia Pando, distrito de San Roque.
“La Fundación se caracteriza por no donar dinero. Al contrario, busca alternativas para que se puedan resolver las necesidades de la institución”, señaló Miranda. Así contó que luego de apadrinar la escuela de Colonia Pando, la Fundación inició una colecta solidaria en corralones de Buenos Aires para adquirir colaboración para comprar las baldosas del patio de la institución. “Nosotros también juntamos nuestro dinero y entre todos compramos el piso que tanto necesitábamos”, contó la docente.
“El presidente de la Fundación, Julio Aro, intentó reunirse varias veces con la gobernación de la provincia para contarles el proyecto. Más allá del padrinazgo, esta es una forma de malvinizar a la sociedad”, aseguró Miranda.
(BDC)
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