El padre de una niña de 10 años asesinada en el tiroteo en la escuela de Uvalde, Texas, y un empleado de la escuela han tomado medidas iniciales que podrían conducir a demandas contra Daniel Defense, el fabricante del rifle semiautomático utilizado en la última masacre de la semana que mató a 21 personas.
Los abogados de Alfred Garza, padre de la estudiante de la Escuela Primaria Robb Amerie Jo Garza, solicitaron en una carta el viernes a Daniel Defense que el fabricante de armas con sede en Black Creek, Georgia, brinde información sobre su comercialización a adolescentes y niños.
“Le pedimos que comience a brindarnos información ahora, en lugar de obligar al señor Garza a presentar una demanda para obtenerla”, escribieron sus abogados en la carta.
Por otra parte, la empleada escolar Emilia Marin presentó documentos en un tribunal estatal de Texas en busca de una orden para deponer a Daniel Defense y obligar a la empresa a entregar documentos, también relacionados con su comercialización. Marin figura como asistente patólogo del habla en el sitio web de la escuela.
La presentación de Marin a última hora del jueves es una petición que permite a una parte comenzar a investigar posibles reclamos.
Aún no se han anunciado demandas contra Daniel Defense derivadas del tiroteo.
Daniel Defense no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios.
El pistolero de 18 años, Salvador Ramos, irrumpió en la escuela el 24 de mayo y mató a 19 estudiantes y dos maestros antes de que lo mataran las fuerzas.
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