Colapsó la capacidad del anfiteatro y se podrán canjear las entradas

n La jornada séptima de la Fiesta Nacional del Chamamé, realizada este jueves, fue -hasta el momento- la más convocante de la presente edición. Miles de espectadores se acercaron al anfiteatro Cocomarola y muchos se quedaron, con entradas en mano, sin poder ingresar al recinto.

Una multitud se acercó para ver la actuación, entre otros, de Mario Bofill y Karina, por ello la capacidad del anfiteatro (15 mil personas) se completó; entonces, se debieron cerrar las puertas provocando el malestar de las personas que no pudieron ingresar pese a que habían adquiridos sus respectivos tickets.

Frente a los ingresos, se agolparon los espectadores, también aquellos que no tenían entradas, ocasionándose discusiones y empujones con la seguridad que presta servicio en el lugar.

Frente a los forcejeos cedió uno de los accesos, ingresó parte de esa gente hasta que se reforzó la seguridad y se retomó el control de la situación.

“Si bien tenemos algunos datos, fue un evento de 15 mil personas o más”, dijo Gabriel Romero, presidente del Instituto de Cultura de Corrientes. “También hubo episodios en las puertas, entonces, en algún momento, la abrimos y perdimos el control”, reconoció el funcionario en declaraciones a Radio Sudamericana.

Debido a los numerosos reclamos que se dieron ayer en las redes sociales, el Instituto de Cultura de Corrientes informó que las entradas de las personas que no pudieron ingresar el jueves 19 serán válidas para acceder al anfiteatro Mario del Tránsito Cocomarola, tanto para hoy como para mañana.

Desde la organización también aclararon que a quienes adquirieron las entradas y no puedan asistir a ninguna de las noches mencionadas, se les devolverá el dinero, una vez finalizada la 32ª Fiesta Nacional del Chamamé. 

Durante la jornada del jueves, fueron numerosos los reclamos que se hicieron sentir contra la organización del evento por el descontrol que hubo respecto a las entradas vendidas o cedidas. 

En las redes sociales se multiplicaron los videos en los ingresos cerrados del anfiteatro una vez que se colmó la capacidad. Incluso se pudo ver como algunos jóvenes saltaban las rejas para poder acceder al espectáculo.