Llovió sobre un incendio que se desplazaba en el Iberá y analizan el impacto que tuvo

Llovió en la zona que se encontraba el mayor foco de incendio de los Esteros del Iberá en cercanías de dos localidades. Las autoridades analizan el alcance que tuvo la caída del agua en el sector. El incendio se originó hace días y avanzaba de Concepción a San Miguel. 

El lugar es jurisdicción del Parque Nacional Iberá, y el foco que atraviesa la reserva es el mismo que se dirige hacia el portal San Nicolás. Hace unos días, los brigadistas nacionales trabajaban para evitar que siga propagándose ya que se encontraba a 20 kilómetros de dicho portal.

San Nicolás continúa abierto, a pesar de la situación, pero en caso de que empeore se cerrará de manera preventiva, indicaron fuentes oficiales.

“Llovió en la zona de Concepción y San Miguel donde se encontraba el mayor foco del incendio del Iberá, no sabemos todavía el alcance que tuvo y no lo sabremos hasta mañana (por hoy) que se disipe un poco, si el fuego se contuvo. Por el momento, el resto de la provincia está todo controlado. Estamos esperando esa evaluación”, indicó Bruno Lovinson, subdirector de Defensa Civil.

“El incendio es el mismo que viene del paraje Ñupuy, llegó al portal Carambola y tomó dirección norte y afectó el sur de San Miguel, una zona forestada que se llama Santa Julia y ahí se habrán quemado unas 7000 hectáreas”, indicó a El Litoral.

“Hasta ayer teníamos ocho equipos de bomberos y brigadas, también está trabajando personal del parque San Nicolás y brigadas privadas de la estancia Santa Julia. Además, operaron aviones alquilados por la provincia, sumados a las maquinarias”, manifestó el funcionario.

En ese sentido, estimó que hoy se hará una evaluación prolija para conocer cuánto afectó la lluvia al incendio en la zona.

El foco de gran envergadura es el mismo que ocurrió en Batel, cercana a la localidad de San Miguel, el domingo pasado. El fuego se desplazaba por zona de bañados y en ese momento aseguraban que hasta que no llegue la lluvia no se podría extinguir.

En localidades cercanas como Mburucuyá llovió 25 milímetros, al igual que en Palmar Grande con dos milímetros más de diferencia. Por su parte, en Itá Ibaté cayeron 9 milímetros y en San Carlos 75 milímetros.  

Portal San Nicolás

Hace unos días, el intendente de parque nacionales, Daniel Rodano, indicó: “Estuvimos sobrevolando la zona y el fuego está a 20 kilómetros del portal, creemos que podemos contrarrestarlo, pero tenemos que ver cómo llega y eso depende de la orientación del viento en ese momento. Tenemos bien hecha la línea de defensa, contamos con equipos de agua, aviones, helicópteros y tenemos todo como para aguantarlo”.

“En el portal San Nicolás al norte hay otro incendio bastante grande que ahora estaba avanzando hacia Cambyretá, pero en este caso es más errático y es un incendio que también comenzó el año pasado”, dijo a El Litoral. 

En ese sentido, el funcionario aseguró que evalúan todos los días cerrar el portal por el movimiento de los vehículos afectados y los helicópteros, además para que el personal trabaje tranquilo y sin preocupaciones. “Los turistas que entren podrían tener una mala experiencia si está todo tapado de humo, no es buena idea que visiten la zona porque no van a disfrutar”, destacó el pasado miércoles.

Ciervo calcinado

En medio de los incendios, un equipo de Bomberos Voluntarios y Brigadistas de San Miguel, divisaron un ciervo que se movía con mucha dificultad y decidieron rescatarlo, porque creían que solo estaba deshidratado y mareado por el humo y el fuego de los incendios. Sin embargo, su situación era peor. el animal tenía gran parte de sus patas consumidas por el fuego, por lo que no pudo resistir.

Pese a que lograron atraparlo y darle agua, el animal murió camino a San Miguel. Había intentado subsistir buscando agua caminando sobre sus huesos, pero su situación era extrema. Se trataba de un ciervo de los pantanos hembra.

“No suelo hacer este tipo de publicaciones desde mi IG (Instagram) pero es imposible de callar lo que está pasando. Por favor dejen de prender fuego", escribió Tomás Miguel Cura, uno de los que protagonizaron el intento de rescate.