Fotomultas: evaluarán el tránsito en Laprida y Alfonsín, donde ya funcionan los radares

Los radares de velocidad colocados en dos nuevas avenidas comenzaron a operar desde el momento en que colocaron la cartelería informativa en esa zona y esperan obtener buenos resultados para disminuir los índices de siniestralidad. De esta manera, se expandió la cobertura del sistema de fotomultas en la ciudad con la inclusión de Laprida y Raúl Alfonsín (continuación de Centenario).

En diálogo con El Litoral, el secretario de Movilidad Urbana, Jorge Sladek, señaló que “los equipos ya estaban aprobados y comenzaron a operar una vez que se colocaron los carteles correspondientes que indican la presencia de los radares”.

De esta manera, esperarán un tiempo prudencial para poder hacer una evaluación de la situación en esos dos sectores, al Este capitalino. “Se hizo un estudio previo para determinar cuáles eran las zonas más complicadas y, de esa manera, se decidió la colocación de los equipos”.

Asimismo, la revisión tendrá que ver con medir el impacto de la presencia de los radares en estas dos avenidas de la ciudad que cuentan con un importante flujo vehicular, sobre todo en los horarios pico. La meta es lograr disminuir la cantidad de infracciones en las mencionadas arterias y, más que nada, que mermen los siniestros viales.

Según los últimos datos oficiales aportados por el Municipio, las fotomultas lograron reducir la cantidad de accidentes en las avenidas donde funcionan desde hace dos años en algunos casos. De esta manera, las avenidas Independencia, Ferré, 3 de Abril, Libertad y Maipú se convirtieron en corredores más seguros desde la implementación del mecanismo que registra excesos de velocidad y el cruce de semáforos en rojo.

Con la posterior inclusión de la costanera y ahora de Laprida y Alfonsín, el sistema logra una mayor cobertura, por lo que esperan que las estadísticas generales puedan mejorar en los próximos meses.

De igual manera, existen otras zonas en las que persisten las dificultades como en la Ruta 5 y Cazadores Correntinos, arterias que en su momento estuvieron en consideración para colocar radares, pero finalmente fueron descartadas por diferentes motivos. 

Luego de un inicio controvertido, las fotomultas se afianzan como sistema de control y vigilancia vial en la ciudad, apuntando a solucionar, más que nada, los excesos de velocidad, principal motivo de accidentes de tránsito.