Inclusión social y calidad, ejes del desarrollo universitario

El especialista en Gestión Universitaria, Paulo Falcón, dictó un taller sobre “Formulación de carreras, planes de estudio y títulos” en el marco del 82º Plenario de Rectoras y Rectores del Consejo Interuniversitario Nacional (CIN) que hasta ayer se desarrolló en la Universidad Nacional del Nordeste (Unne).

El director nacional de Gestión Universitaria del Ministerio de Educación de la Nación explicó que su taller se basó esencialmente en la exposición e intercambio con autoridades y personal de las áreas académicas y de posgrado de la Unne, con la idea futura de lograr volcar las demandas sociales a los planes de estudio de las distintas carreras universitarias, sin dejar de prestar atención a la calidad en la formación de los futuros estudiantes y egresados.

Falcón manifestó que la universidad pública debe responder a las demandas sociales de la comunidad que la sostiene, “no sólo porque ella se sustenta con sus aportes sino que, además, vivimos en un contexto en el que la sociedad actual es definida como la sociedad del conocimiento, por lo que la Universidad tiene, a su vez, obligaciones de formación, de generación de conocimientos y de transferencia de conocimientos con su comunidad”. 

Consultado sobre cómo se logra asociar la idea de una educación superior con fuerte proyección en internacionalización a la difícil realidad social y económica del contexto en el que se inscribe -como es el caso de la Unne- Paulo Falcón respondió convencido que “la internacionalización es un eje para tener presente, pero considero que la universidad pública argentina debe estar basada en dos ideas ejes. La primera tiene que ver con la responsabilidad con la inclusión social de la universidad, y la segunda está ligada al desarrollo universitario sobre la base de determinadas premisas de calidad. Es decir, inclusión y calidad como ejes para el desarrollo universitario, sin dejar de lado el contexto internacional, el cual nos obliga a pensar localmente mirando hacia afuera. Esa idea de lo global asociado a lo local tiene que ser agenda de nuestras universidades”, enfatizó.

“Dijimos hace muchos años que la escuela secundaria gradúa menos chicos de los que podría graduar. Esto significa que hay un gran porcentaje de chicos que se demoran en egresar del secundario y, peor aún, existe otro gran porcentaje que directamente no lo termina. Entonces, claramente, la Universidad sufre en sus aulas en los primeros años los problemas de formación de esos chicos”, remarcó el especialista.

En este sentido, dijo que una de las respuestas de política pública propuestas y encaradas para trabajar la idea de articulación entre la escuela secundaria y la Universidad fue el programa “Nexos”, “el cual, como su nombre lo expresa, generó un dispositivo que ensambla dos componentes del sistema educativo sobre la base de centrar al estudiante trabajando el tránsito de un nivel a otro”, explicó Falcón.