En el asentamiento del barrio Patono, ubicado al sur de la ciudad, habitan unas 200 de familias en situación de vulnerabilidad que requieren asistencia alimentaria: habitantes del lugar señalaron que los comedores y lugares que proveen comida a los niños y las niñas del lugar no reciben ayuda oficial y por lo tanto corren riesgo de no continuar asistiendo. Mientras que un merendero ubicado en el predio informal dejó de funcionar, hace poco más de un mes un grupo de vecinas decidió comenzar a asistir a los menores del lugar y piden colaboraciones.
En el asentamiento del barrio Patono habitan unas 150 familias numerosas en situación de vulnerabilidad y los habitantes se encuentran solicitando ayuda al Estado para poder brindar ayuda alimentaria.
El comedor “Ayudemos a los niños”, ubicado sobre la calle Vidal, brinda meriendas a los niños y niñas del predio de lunes a viernes y solicitan colaboraciones para poder sostener las actividades.
Anteriormente, el merendero “Niños felices” que funcionaba los fines de semana en el asentamiento del Patono dejó de brindar asistencia alimentaria debido a la falta de insumos.
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