El llamado doctor Rubén Mühlberger se hizo conocido de la mano de Moria Casán, hace más de 10 años, en julio de 2009, cuando la conductora lo acompañó en un viaje por Europa en el que asistió a un congreso sobre la llamada medicina ortomolecular.
"Soy el modelo vivo del cuerpo del futuro", repetía Moria desde Roma, con su famosa impronta. El método Mühlberger se convertió rápidamente en moda no solo en el ambiente de los artistas sino también enrtre deportistas y políticos.
"Soy Rubén Mühlberger y voy a transmitirle mis treinta años de experiencia en la medicina biomolecular". Con esas palabras, el médico que está en boca de todos presentaba el año pasado El cuerpo que quiero, su sexto libro, el mismo que Susana promocionó este verano en Instagram con una foto en su chacra de Punta del Este. "Lo voy a leer hasta la última página", prometía la diva de divas, que llegó hasta él gracias a Moria.
"Es experto internacional en medicina genética, terapias ortomoleculares, hormonales y anti-aging. A los 24 años, se recibió de médico en la Universidad Nacional de La Plata y, luego de concluir su residencia hospitalaria con orientación quirúrgica, viajó al exterior para proyectarse en el campo de la medicina biológica antiedad", asegura la página web de Mühlberger, todavía en línea, donde se exponen todos sus pergaminos profesionales.
En el sitio se promocionan con especial detalle todas las entrevistas y eventos para prensa donde estuvo el Dr. RM (así le llaman), quien en 2012 debutó con El cuerpo del futuro, su propio programa de tevé los sábados a la noche por C5N. Y allí también aparecen imágenes de todos los famosos que pasaron por su consultorio. O casi todos.
"Ese consultorio es como Comodoro Py, vas a ver a todos los famosos", contó el año pasado Moria en una charla con Pamela David en la que recordó la oportunidad en que se cruzó con la por entonces diputada Elisa Carrió. "Ella no sabía que yo estaba. La vi, estaba en batita y ropa interior en una cabina donde atiende el doctor", comentó sobre Lilita.
Mientras su perfil profesional y empresarial crecía con números exponenciales, la vida personal de Mühlberger sufría varios reveses. Uno de los más resonantes la tuvo como protagonista a su hermana Daniela. "Mi hermano no es buena persona, es un egoísta", sentenció la mujer en el programa Infama, en 2013, cuando lo conducía Santiago del Moro. El doctor ya se había peleado con su madre Elsa y ahora su hermana lo denunciaba porque la había echado sin pagarle lo que le correspondía.
Sin embargo, el momento más complicado en el plano mediático para Mühlberger se dio tras un cruce con Marcela Feudale en el que el doctor quedó muy mal parado. El médico se animó a diagnosticar en vivo a la locutora durante un programa de Intratables, en 2013, donde ambos estaban como invitados.
"Ella tiene un problema con su carácter, una cuestión interna. No es lo simpática que se muestra... ¿Y los bravos cómo se ocultan? Como los mansos", afirmó el médico sobre Feudale sosteniendo sus dichos en lo que él llamó su "diagnóstico por ojo clínico". E insistió: "¿Vos te sentís muy avejentada? Vos sos una persona malhumorada, producto de tu problema de tiroides, tenés un problema de inflamación y envejecimiento prematuro". La incómoda discusión se terminó recién cuando Mühlberger aceptó de mala manera pedirle disculpas a Marcela.
En el año 2015, Mühlberger se separó de quien era su pareja y socio mayoritario en el establecimiento, Alejandro Pugliese, conflicto que resolvió reabriendo su clínica en el mismo lugar pero con el nombre Mühlberger Klinik. La situación con Pugliese, quien lo acusó de estafa, pasó al plano judicial. Mientras tanto, el polémico doctor se reconciliaba con Moria y relanzaba su marca con la presencia de nuevas figuras de la talla de Charly García y Diego Maradona.
La condena de sus colegas se hacia presente más que nada en las conversaciones en off, en las que argumentaban que sus tratamientos que prometían vivir "más allá de los 120 años" no estaban registrados en el Ministerio de Salud de la Nación.
"Yo tengo la fórmula para el coronavirus", aseguró el doctor, mencionando que había participado de congresos donde tomó nota de cócteles antivirales para enfrentar al COVID-19. Justo en aquel momento se viralizó la imagen de un cartel promoviendo el tratamiento en su clínica. Y llegó la denuncia que provocó la inspección, la clausura y su detención.
Por estas horas el médico de los millones que se codeaba con las figuras más importantes del país espera que su abogado Mariano Cúneo Libarona encuentre la manera de liberarlo de la Comisaría Comunal número 6 en el barrio Caballito
