Lo condenaron a 7 años de prisión por amenazar y violar a su expareja

El Tribunal Oral Penal Nº 2 de Corrientes condenó a un hombre a siete años de prisión por abusar sexualmente de su expareja frente a su bebé de once meses, en un hecho ocurrido en diciembre del 2018 en la localidad de Bella Vista.

Se trata de Diego Alberto Alvarenga de 32 años, quien fue hallado culpable del delito de abuso sexual con acceso carnal. El fiscal Gustavo Schmitt, en sus alegatos había solicitado la pena de seis años de prisión. El condenado cumplirá la pena en la Unidad Penal Nº 1 de Corrientes, una vez que el fallo quede firme.

En el debate, el acusado compareció frente al Tribunal y afirmó que la relación sexual que tuvo con su expareja fue consentida. Sin embargo la víctima, de 23 años, y madre de tres hijos aseguró que la atacó mientras dormía junto con su bebé y la violó.

De acuerdo a la investigación, el hecho se produjo el 15 de diciembre del 2018 en una vivienda situada por calle Sudamericana. La víctima reside en el mismo domicilio que su madre, pero en una casilla ubicada en el fondo del terreno.

Ese día alrededor de las 2.30 de la madrugada, Alvarenga ingresó al domicilio y tras violentar una de las ventanas fue a la habitación de la joven y bajo amenazas la violó. Tras someterla, el acusado le sustrajo unas tarjetas de crédito y huyó. Cuando pudo sobreponerse del ataque, la mujer llamó a la Comisaría de la Mujer y denunció el hecho. Una comitiva de policías llegó a la vivienda e iniciaron los trabajos de la pesquisa. Secuestraron las prendas interiores de la víctima como así también otros elementos. 

En tanto un médico la examinó y constató las lesiones sufridas. Seis días después del ataque sexual, Alvarenga fue detenido en un operativo policial y alojado en la Comisaría de distrito.

Las pericias determinaron que el líquido seminal hallado en las prendas de vestir de la víctima coincidían con el ADN del detenido. 

Durante el debate, la víctima contó que varias veces el acusado abusó de ella y que hacía meses que estaban separados. No radicaba la denuncia por miedo a que le pasara algo malo a sus tres hijos, ya que vivía sola con ellos. Precisó que él siempre la amenazaba con destruir todo lo que tenía.

(NG)