Allanaron un criadero clandestino de perros

La Policía allanó ayer un criadero clandestino de perros, en donde más de cuarenta ejemplares de diversas razas vivían en malas condiciones. Los vecinos del barrio realizaron la denuncia. 

El hecho sucedió en una vivienda del barrio Molina Punta. La dueña del inmueble hacía cruzas de perros de forma ilegal y en condiciones de hacinamiento e insalubres para los animales.

La denuncia penal que movilizó al personal policial fue hecha por los vecinos del lugar que, tras varios años de sufrir la situación, lograron canalizar el reclamo contra el maltrato animal ejercido en el domicilio, luego de recabar las pruebas exigidas. En el operativo también estuvieron presentes miembros del grupo Yaguá Roga, un centro de recuperación y adopción de perros en situación de calle, y el médico veterinario de la Policía, Javier Aucar. 

La vivienda que oficiaba de criadero para la reproducción y venta de cachorros de raza, se encuentra ubicada en la intersección de las calles Las Dalias y Josefina Contte. Tras el operativo, todos los animales fueron rescatados y se encuentran judicializados. 

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La situación data de al menos cuatro años. Durante ese tiempo los vecinos de la mujer presentaron reclamos en la Municipalidad por ruidos molestos, olores insoportables y el maltrato generalizado, pero nunca fueron escuchados, según indicó a El Litoral Adriana Gaziano, quien participó de la denuncia como asesora legal. 

Adriana se mostró emocionada por el logro de los vecinos, quienes durante años debieron aguantar en la quietud de sus hogares los gritos y el maltrato por parte de la dueña del criadero hacia los perros, y los aullidos desesperados que irrumpían en el silencio de las noches y los días.

“Los perritos eran explotados, vivían entre sus heces, encerrados en jaulas y sin periodos de recuperación entre cada cruza”, detalló Adriana con pesar. 

Los maltratos también llegaban a gritos, insultos y patadas.  Y la falta de humanidad se acentuaba aún más cuando “alguno se moría, porque los descartaban como una caja de leche vacía”. 

“El lunes la mujer trajo más perritos bebés y uno se le cayó de la mano al piso, se golpeó la cabeza y murió: como si nada lo tiraron al basurero”, contó Adriana, al borde de las lágrimas. 

Según indicaron fuentes oficiales, la vivienda carecía de las condiciones mínimas de sanidad e higiene y algunos perros estaban encerrados en espacios diminutos. Mientras que algunos canes estaban bien cuidados, otros se encontraban extremadamente desmejorados. 

En tanto, la dueña de la vivienda, identificada como Silvia Viola, tendrá un plazo de entre 20 y 35 días para ordenar su domicilio e intentar recuperar a los animales del calamitoso estado en que los tenía. Por el momento, los perros rescatados quedarán bajo el cuidado de Gaziano.

“No tengo palabras para agradecer al fiscal, fueron momentos muy angustiantes porque fue un proceso largo y de mucha incertidumbre”, contó Gaziano. “Nos embarcamos en una historia sin saber cómo terminaría”, comentó y, con la voz tomada, expresó: “El sueño de darles una mejor vida, lejos del flagelo humano, se cumplió”. 

(ME)