Un efectivo de Prefectura Naval fue condenado a un año y medio de prisión en suspenso por amenazar de muerte a su expareja. Ayer en horas del mediodía, el Tribunal de Juicio, constituido por el Dr. Marcelo Fleitas, y asistido por el Dr. José Monti, lo halló culpable del delito de “Daño Simple” y “Amenazas Simples”.
El magistrado tuvo como atenuantes, la falta de antecedentes, la juventud del acusado, y el testimonio de su actual pareja, quien dio fe de la buena conducta del condenado.
Como agravantes, el juez tuvo en cuenta que “el hecho se produjo en un contexto de violencia de género”, y consideró “el daño psicológico provocado a la víctima”.
En las conclusiones finales, la Fiscal de Juicio, Dra. Daniela Di Tomaso, sostuvo que el imputado, cometió “delitos contra la propiedad y la libertad, valiéndose de la relación de cercanía con la víctima”.
Pidió al Tribunal que considere “los daños psicológicos causados en la victima, y su hija”, y aseguró que el acusado “comprende la criminalidad de sus actos, siendo una persona instruida y asimismo actuó con violencia”.
Para finalizar pidió la pena de dos años de prisión.
Por su parte, la defensa técnica, ejercida por el Dr. Jonatan Biaut, aseveró que “existen muchísimas contradicciones, entre los testimonios de la víctima y una testigo, y advirtió sobre ésta última “estuvimos en presencia de un falso testimonio”.
Asimismo, el letrado expresó que “existieron contradicciones en las pruebas presentadas por el Ministerio Público Fiscal” y negó “que exista peligro del imputado hacía la víctima”.
Se pudo conocer, que la defensa, apelará la sentencia condenatoria del Tribunal.
Antes de conocer el veredicto final, el presidente del Tribunal, le preguntó al imputado, si deseaba manifestar algo y éste accedió.
“Las dos familias estamos pasando este mal momento, yo quiero que ella sea feliz, nunca la molesté, nunca la jodì, nunca la vi en ninguna fiesta”. Prosiguió diciendo “quiero que se haga justicia, no me considero una persona mala, quiero que la verdad salga a la luz. Ojalá algún día, ella siente cabeza. Yo me presenté voluntariamente a la justicia, porque no tenía nada que esconder”, y remató “seguramente ella en este momento se está burlando de mí”, afirmó según precisó el portal de noticias Confirmado.
La próxima semana, se conocerán los fundamentos del fallo.
De acuerdo a lo denunciado, el hecho ocurrió el 22 de octubre del 2021, minutos antes de la medianoche, en una vivienda de calle Sarmiento al 1500, ocasión en que el acusado, en uso de una relación desigual de poder, le exige a su expareja, que le entregue el teléfono celular, propiedad de la misma, a lo que la mujer se niega porque anteriormente ya le había roto otros celulares. Fue en esa oportunidad, tras un forcejeo, el imputado toma el teléfono celular, lo apoya sobre la mesada de la cocina y al no poder revisarlo por estar bloqueado, rompe la pantalla, dejando al aparato inutilizado.
Luego de ello, toma su pistola reglamentaria (efectivo de la Prefectura Naval Argentina), y apunta a la cabeza de la víctima y le dice: “Te voy a matar y voy a terminar preso, te voy a prender fuego tu auto cuando te lo vea en la calle”, infundiéndole temor con sus amenazas. Posteriormente se acostó a dormir, colocando dicha arma debajo de la almohada”.
(NG).