El director de Espacios Verdes de la Municipalidad, Juan Solís, advirtió que “hay una ordenanza municipal que determina la prohibición de árboles que dañen las veredas”. Es por ello que esta repartición comenzará en pocos días más un operativo para extraer aquellos especímenes que perjudiquen el tránsito peatonal o produzcan roturas en el pavimento.
Solís consideró importante señalar que “no se van a extraer todos los árboles, sólo aquellos que estén en esta situación (por lo mencionado anteriormente), o los que molesten a otros vecinos”. Por otra parte aclaró que “quedarán aquellos que tengan la cazuela (también conocida como cantero) correspondiente y una correcta plantación”.
Una de las especies prohibidas en la vía pública es el Ficus, un árbol
de crecimiento acelerado que con el atractivo de un follaje frondoso y brillante ganó tantos adeptos como desventajas implica para los frentistas. Su sombra resulta, a la larga, demasiado cara, porque las raíces “se desarrollan rápidamente bajo tierra levantando las veredas y aún peor es que rompe las cañerías de las casas produciendo un daño mayor”, expresó el responsable del área Espacios Verdes del Municipio.
En este sentido, Julio Bartra quien trabaja en la coordinación del centro municipal de Apoyo a la Producción recordó que “uno de estos arbustos (por el Ficus) que se encuentra en el Parque Mitre ya causó averías en los baños que están en este lugar rompiendo sus cañerías, lo que imposibilita el uso de los sanitarios”. Además agregó que “los problemas aparecen luego de cinco o seis años de haber hecho su plantación, cuando sus gruesas raíces comienzan a desarrollarse”.
Por otra parte, el ingeniero agrónomo explicó que “el Ficus posee un gusano ‘taladro’ que ingresa por la raíz y carcome la médula dentro del árbol produciendo la sequedad de esta especie vegetal. Además es propenso a sufrir el ataque de hongos y bacterias”. Ello implica peligros de desmoronamiento. Si bien el exterminio de estos parásitos se logra mediante el uso de productos agroquímicos, “su plantación no es recomendable en la vía pública por el daño que produce la expansión de sus raíces”, agregó el especialista.
SOLUCIONES
Ante esta situación, Espacios Verdes recomienda a los vecinos la plantación de cítricos como naranjo y limonero, entre otros; o azahares, mirto, libustro áureo o palmeras en aquellas veredas que son angostas, mientras que en aquellas que tengan mayor amplitud se pueden plantar fresnos o chivatos.
Bartra en este sentido expresó que “en el momento de plantar los vecinos deben observar que el volúmen (de ramas y follaje) que hay en la copa de los árboles se encuentra bajo el suelo”.
Por otra parte aclaró que “los árboles que se están plantando por parte de esta cartera provienen del vivero municipal” y cumplen con los requisitos establecidos por la normativa vigente.
LA ORDENANZA
Si bien la ordenanza fue aprobada el 19 de octubre de 1983, más de dos décadas atrás, muchos vecinos no tienen conocimiento de ella y las autoridades no se preocuparon demasiado por aplicarla. La norma, que lleva el número 1355, expone en su artículo sexto: “Queda expresamente prohibida la localización en la vía pública de las siguientes especies vegetales: Ulmus Pumila (Álamo); Ficus Elástica (Gomero); Melia Azedech (Paraíso); Platanus Aceritolia (Plátano); Popolus Alba (Álamo Plateado); y Casuarina Cucuminga Miana (Casuarina).