A 150 kilómetros de la capital provincial se encuentra uno de los lugares más bellos de Corrientes: el Parque Nacional Mburucuyá. Este paraíso natural abarca unas 17.600 hectáreas que fueron donadas a la Administración de Parques Nacionales por Troels Pedersen y su esposa Nina Sinding en noviembre de 1991. A 21 años de aquel hecho, el sitio es uno de los favoritos de quienes visitan esta parte del país.
La Ruta Provincial N° 86 que une las localidades de Mburucuyá y Palmar Grande es hoy la principal vía de acceso al Parque Nacional Mburucuyá, uno de los sitios naturales más bellos de Corrientes. El lugar cuenta además con otro ingreso por Ruta Provincial Nº 13, entre las localidades de Manantiales y la intersección con la Ruta Provincial Nº 75.
“Quienes nos visitan son recibidos o acampan a metros de la mansión donde vivieron los Pedersen”, contaron a El Litoral desde el área de prensa del Parque y agregaron que el sector protegido se maneja con horarios de verano e invierno: “El primero se extiende del 1 de octubre al 30 de abril y el segundo del 1 de mayo al 31 de septiembre”, explicaron.
Una vez en el Centro de Informes los visitantes pueden realizar dos de los tres senderos peatonales del parque: el Yatay y el Histórico, en tanto que el sendero Che Roga está a unos 700 metros, sobre la Ruta Provincial 86.
Yatay: parte del Casco Histórico Santa Teresa y arriba al estero Santa Lucía, lugar que tiene un rústico muelle de madera donde se oyen las típicas aves acuáticas, se observan los palmares de yatay y se escuchan también los cantos del ipacaá y el chajá. Este recorrido tiene una duración de 3 horas y en verano se lo realiza a partir de las 17.
El sendero Histórico se encuentra en el área de uso público Santa Teresa. Este cuenta la historia del lugar cuando fue una estancia ganadera y resguarda una doble historia: la época junto a los patrones y el encuentro para reconstruir las vivencias de La Compa-ñía.
El Che Roga es el tercer sendero, tiene for-ma de círculo y está conformado por palmares jóvenes, lagunas azules y árboles, algo muy recomendable para grupos educativos. “En verano este recorrido comienza a las 18”, apuntaron desde el parque.
Cabe señalar que desde el 2010 el lugar cuenta con guías de sitio, se trata de hombres y mujeres de zonas urbanas y rurales de Mburucuyá que combinan sus saberes con los que brinda la Administración de Parques Nacionales para que los visitantes descubran este patrimonio natural y cultural. “Pa-ra contactarlos se pueden comunicar al 03782 15504644 - 15486299 ó 15443329”, apuntaron desde el área de prensa del Parque Nacional Mburucuyá.
El precio estimado para la contratación de guías es de 30 pesos por persona o en el caso de los grupos se cobra 10 cada uno hasta 15 personas y 7 pesos hasta 45 personas.
Fauna
El Parque Nacional Mburucuyá tiene gran diversidad de fauna, así por ejemplo se detectaron 29 especies de peces, que representan el 36 por ciento de las citadas para el sistema de los Esteros del Iberá. Tiene 21 especies de anfibios, que representan el 30 por ciento de las características para la región, entre estos se destaca la ranita de Pedersen, la rana de las cardas, que fue redescubierta para la provincia de Corrientes y constituye una variedad nueva que lleva el nombre del botánico que diera origen a este parque. En las costas de los esteros, riachos y lagunas se observan yacarés negros y también los del tipo ñato u overo.
Hay 291 clases de aves que representan el 70 por ciento de las clasificadas para la provincia. Es posible avistar aves de pastizal como la monjita dominicana, el ñandú, yetapá de collar, el tachurí coludo, el capuchino castaño, el capuchino corona gris y el capuchino pecho blanco, entre otros.
Visitar el Parque Nacional Mburucuyá puede ser una experiencia sumamente enriquecedora tanto en los días de invierno como en verano, ya que todas las actividades están perfectamente organizadas de acuerdo a la temperatura de cada temporada.