El local de Proveeduría Electrónica quedó totalmente destruido por el fuego y las pérdidas son millonarias. César Giménez, uno de los 13 empleados del comercio que se incendió en la tarde del domingo, manifestó a la prensa que el local sufrió un daño grave en su estructura. Recordó que lo único que quedaba encendido durante el tiempo que se cerraba el local eran los equipos de seguridad y quizás alguna computadora. “Va a haber que arrancar de vuelta”, señaló y resaltó que cuentan con sucursales para respaldar lo perdido en el siniestro y probablemente se deba alquilar un nuevo local para continuar trabajando. “Uno pasa mucho de su vida acá y ver como se prende fuego es shockeante”, manifestó el empleado. Según el parte policial el fuego destruyó cajas registradoras, mostradores, vidrieras, entrepiso de madera, depósito, sector oficina de administración, pasillo, baño. Además de parlantes, luces, elementos de computación, electrónica, telefonía, elementos de sonido, gran cantidad de artículos de electricidad, artefactos eléctricos y elementos de plástico, entre otras cosas.
