“No por ser artificial es malo, y no por ser de la Iglesia es anticuado”

El dictado de la educación sexual siempre suele implicar un debate que involucra a la religión católica, la cual cuenta con escuelas que se rigen bajo sus principios. Sin embargo, la docente Adriana Fontana, quien se desempeña en un profesorado y en una secundaria, opinó en diálogo con El Litoral que “no existen diferencias sustanciales” entre la mirada católica y la no católica, “porque estamos hablando de uno de los aspectos fundamentales que hacen a la persona humana, que es su sexualidad”.

En ese sentido, subrayó que las preguntas más frecuentes que realizan los adolescentes es “todo lo que tiene que ver con el cuidado en la práctica de la sexualidad en sí, como los métodos anticonceptivos”. A partir de este punto, Fontana ejemplificó que “vemos cuáles son los métodos que propone la Iglesia si estamos en una escuela católica, y también cuáles son los métodos artificiales”. “Hacemos referencia a que uno no va para nada en contra del otro. No por ser artificial es malo, y no por ser de la Iglesia es anticuado”, añadió.