Corina De Bonis, la maestra que será indagada el próximo 2 de mayo por falso testimonio, ratificó ayer la declaración que en su momento había hecho ante la Justicia y recordó que fue subida a un auto rojo, golpeada y que le escribieron con un punzón en su abdomen: “ollas no”.
El 12 septiembre de 2018, un mes después de que una explosión en una estufa provocara la muerte de dos personas en una escuela primaria del partido bonaerense de Moreno, De Bonis denunció ante la Justicia haber sido secuestrada y torturada.
Sin embargo, la semana pasada Emiliano Buscalia, a cargo de la UFI Nº 5 que interviene en la causa, decidió imputarla por falso testimonio asegurando que hay “inconsistencias en su relato” y un “análisis que en tiempo y espacio no coinciden”, por lo que deberá presentarse a declarar la semana que viene.
“Yo se lo que pasé, yo se lo que viví y nadie me puede influenciar en lo que pasó”, aseguró la mujer y sentenció luego: “No tengo nada que ocultar, es mi verdad, así que me haré presente y contestaré todas las preguntas como lo he hecho hasta ahora”.